Tristeza, pero no asombro. Así se ha recibido entre la familia de la Semana Santa de Orihuela, declarada de Interés Turístico Internacional, la decisión del Obispado de Orihuela-Alicante de suspender todos los desfiles de Semana Santa y las estaciones de penitencia en la Diócesis que estaba previsto que se celebraran en 2021 en la vía pública. "Estamos tristes, pero no nos ha pillado por sorpresa, era de esperar por la situación actual que estamos viviendo, estamos entristecidos", ha manifestado a INFORMACIÓN José Sáez Sironi, presidente de la Junta Mayor de Cofradías, Hermandades y Mayordomías de la Semana Santa de Orihuela

Por segundo año consecutivo, las calles de la ciudad se quedarán sin los desfiles procesionales que tanta fama tienen no solo en la provincia, también en el resto de España por particularidades como el paso de La Diablesa que desfila en la procesión del Santo Entierro, el único demonio de España que procesiona durante la Semana Santa. Sáez Sironi lamenta que "llevamos dos años cancelando la Semana Santa y es muy triste porque el objetivo de la Junta Mayor es el de sacar las procesiones a la calle, hacer pública la Pasión del Señor, pero esta pandemia lo impide, y está siendo muy frustrante".

La Junta Mayor se reunirá mañana para decidir los actos simbólicos que tiene previsto convocar para compensar la suspensión de los desfiles procesionales. "Prepararemos algo para recordar que estamos en periodo de Semana Santa, algún pequeño acto si nos permite la situación sanitaria, como hicimos el año pasado con lo de música en las calles durante el confinamiento", ha explicado el presidente de la Junta Mayor.

Sáez Sironi se resigna a decir que "no nos queda otra que otro año en blanco, ahora a pensar en la Semana Santa de 2022, a ver si es posible", dice, aunque no se fía mucho "porque ya podemos esperar cualquier cosa puesto que con esta pandemia se puede esperar ya cualquier cosa, cada día te da una sorpresa, pero confiamos en que el año que viene ya sí podamos celebrar como corresponde la Semana Santa".

Como ya sucediera el pasado año cuando se anunció la suspensión de la Semana Santa, los cargos que debían ejercer en 2020 y después en 2021 serán los mismos para 2022. Son los de la Glosadora del Pregón, María Dolores Bregante Illescas, el Parque de Bomberos de Orihuela como Nazareno, Alejandro García Rocamora, abanderado en la Procesión General de Viernes Santo (que en 2019 tampoco pudo salir por la suspensión de la procesión debido a la lluvia) y el cirujano Miguel Ángel Morcillo, que espera que en 2022, tras tres años sin poder ejercer como Caballero Cubierto en la procesión del Sábado Santo, pueda ya procesionar (en 2019 pudo dar su discurso en la recepción en el Colegio Santo Domingo, pero una inoportuna lluvia obligó a suspender la procesión en la que desfila, y organizada por el propio Consistorio, y el año pasado también se canceló por la crisis sanitaria). Morcillo ha pasado a la historia de la Semana Santa de Orihuela ya que, por primera vez desde 1620, será por cuarto año consecutivo Caballero Cubierto, en 2022.