El Ayuntamiento de Orihuela ha arrendado, al fin, el chalet de la carretera de Hurchillo con el fin de destinarlo a la residencia del Centro Oriol. La edil de Bienestar Social, Almudena Baldó, señala que “finalmente se ha dado el visto bueno este contrato esperado para la residencia Oriol y es importante destacar que el nuevo modelo de residencia por el que el Ayuntamiento de Orihuela ha apostado, en connivencia con Conselleria, es sin duda un modelo que va a permitir a los usuarios ser más independientes, y salir del modelo institucional de residencia que no es tan acogedor”. La edil insiste en que el objetivo principal era “ofrecerles un hogar, crear espacios agradables, autónomos y diferenciados, como cualquier persona que durante el día acude a su puesto trabajo y por la noche regresa a su hogar. Queremos eso para nuestros usuarios porque estamos convencidos de que es la mejor para ellos, que tengan su casa, ellos lo están deseando y están muy ilusionados”.

La adjudicación de este contrato, que tendrá una duración de un año, prorrogable por otro más, fue aprobada ayer en la Junta de Gobierno Loca por un importe total de 36.300 euros (IVA incluido). Dentro de las características del inmueble que albergará la residencia destacan los más de 2.000 metros cuadrados de superficie de la parcela, de los cuales 510 son habitables y 391 corresponden a la zona cubierta de ocio. Además, el inmueble se encuentra cerca y con un buen acceso peatonal al centro de Orihuela, además de contar en las inmediaciones con transporte público, según asegura la Concejalía de Bienestar Social.

La edil de Bienestar Social destaca que el chalet es "un modelo que va a permitir a los usuarios ser más independientes, y salir del modelo institucional de residencia que no es tan acogedor"

Los residentes discapacitados dejarán así de seguir dando tumbos por la comarca desde que se vieron obligados a abandonar su hogar en septiembre de 2019, al quedar con importantes daños las instalaciones de la residencia en el Palmeral de Orihuela por culpa de la DANA. El Ayuntamiento de Orihuela los ha reubicado hasta en seis hogares distintos en año y medio. Es la triste situación por la que han pasado los 16 usuarios de la residencia Oriol de Orihuela, todos ellos con discapacidad psíquica y bajo la tutela de la Generalitat Valenciana, que tuvieron que ser rescatados por los servicios de emergencia tras quedar atrapados en su centro por las inundaciones de la gota fría. El Ayuntamiento de Orihuela, que mediante convenio con la Conselleria de Bienestar Social tiene asumida la competencia y cuidado de estos usuarios, les ha dado hasta seis soluciones habitacionales, todas provisionales, ya que los usuarios permanecen las 24 horas en la residencia, con salidas para acudir al Centro de Día donde se encuentran con otros usuarios y llevan a cabo actividades. Así, han pasado por casas de familia de acogida, una residencia universitaria, un hostal en Orihuela, un albergue de verano en Guardamar, un chalet en La Mata y la residencia del Centro de Discapacitados de Torrevieja, construida en 2010 y que los usuarios del Oriol inauguraron. El Ayuntamiento de Orihuela defiende que, junto a la Conselleria de Políticas Inclusivas, "han trabajado en buscar de la mejor opción para que los usuarios del centro puedan disponer de unas instalaciones en condiciones".

Plantilla bajo mínimos

Cambiemos Orihuela, por otro lado, denunciaba hace unos días la falta de cobertura de las bajas del personal de la residencia Oriol. El edil de la formación, Carlos Bernabé, criticó la «precaria situación» en la que se encuentra la plantilla. «Hay numerosas bajas por cubrir, jubilaciones que tienen pinta de ser plazas que se quieren amortizar y no sé está contando con las personas que hay en bolsa y que durante los últimos 15 años han ido cubriendo las necesidades del servicio», dijo el concejal. Bernabé añadió que «tampoco sé está llegando a las cuotas de profesionales de atención directa y de equipo técnico que en los últimos años se estaba dando». Para Cambiemos, el gobierno local lleva a cabo una «privatización encubierta» del servicio dado que el Ayuntamiento estaría encomendando a la empresa Diverty la atención a la residencia en determinadas jornadas, como fines de semana, «para cubrir las horas que no puede o quiere cubrir el Ayuntamiento con personal propio como le correspondería».

Por su parte, trabajadores de la residencia han corroborado la denuncia de Cambiemos. Aseguran que advirtieron tanto a la edil de Personal, Luisa Boné, como a la de Bienestar Social, Almudena Baldó, de que muchos contratos finalizaban el 31 de diciembre y que si no seguía ese mismo número de trabajadores "el servicio sería inviable". El Ayuntamiento llamó hace mes y medio a varios educadores y cuidadores para que se incorporaran en enero. Sin embargo, el consistorio no ha materializado la contratación de ese personal a estas alturas y el servicio está bajo mínimos. Además, hay dos bajas sin cubrir desde el mes de octubre y actualmente la plantilla la componen cuatro trabajadores a tiempo completo y otro con reducción de jornada. El resto del servicio lo está cubriendo una empresa privada, como denunció hace unos días Cambiemos Orihuela.