90.485 euros más. Es lo que ha pagado el Ayuntamiento de Torrevieja a la empresa que se adjudicó las obras de construcción de un parque en el Mirador de la Casilla. Un espacio público sin terminar, medio abandonado, y que últimamente se viene utilizando como secadero de las toneladas de algas que recoge el servicio de limpieza de playas: secas pesan menos y su eliminación es más económica. Esta consignación de 90.485 euros la hizo efectiva el Ayuntamiento el pasado lunes en el juzgado de lo Contencioso de Elche.

Es la última partida de los más de 468.000 euros que la UTE A.S.C. Gestión de Obras y Francisco Gutiérrez reclamaba al municipio por el incumplimiento del contrato para llevar a cabo una intervención que se anunció como uno de los grandes proyectos de referencia del municipio hace, ni más ni menos, que dos décadas.

En el último pleno del Ayuntamiento el alcalde Eduardo Dolón (PP) al ser preguntado por este asunto aseguró que el «litigio» tiene su origen en el hecho de que los técnicos municipales no reconocieron las certificaciones que la empresa había presentado. Consideraban que los trabajos sobre el terreno no se ajustaban al valor de las facturas presentadas, ni al proyecto aprobado. La empresa fue a reclamar por la vía judicial al contencioso administrativo. Y ha ido ganando de forma sucesiva distintas reclamaciones desde 2008, sin que el municipio se allanase, lo que hubiera ahorrado una buen desembolso de intereses de demora a las arcas municipales.

El resultado de un proyecto que se anunció en 1999 es que el Ayuntamiento ha pagado una cantidad muy importante de dinero público -más de medio millón de euros- para un equipamiento al que no se le puede dar uso. Coste que no incluye la acumulación de la montaña de escombros retirada del barranco de Torreblanca con la que se levantó el mirador situado en la bifurcación de la N-332 en el acceso norte a Torrevieja. Durante el anterior mandato municipal fue vallado y se retiraron escombros y enseres. El Mirador ocupa una parcela de 30.000 metros que en el Plan General aparecen como zona verde, aunque aproximadamente la mitad figura para uso de equipamiento público.

En agosto de 2019, el portavoz de la junta de gobierno, Federico Alarcón, tal y como recordó en ese pleno la edil portavoz de Ciudadanos, Pilar Gómez, anunció que el alcalde había dado orden al área de proyectos para que elaborara una propuesta de finalización del espacio verde. En los presupuestos de 2020 en vigor figuraba una partida para su concluir el proyecto pero no hay ni rastro ni del proyecto ni de la licitación de la obra. En aquella comparecencia Alarcón se aseguró que solo quedaba por abonar 17.000 euros de beneficio industrial a la empresa. Algo que no se corresponde con lo el pago que finalmente ha realizado a la mercantil esta semana.