La Generalitat ha licitado la construcción de una planta fotovoltaica que permitirá reducir en un 40% el consumo energético necesario para bombear el agua del trasvase Tajo-Segura a las casi mil hectáreas de bancales en producción de mandarinas, limoneros y naranjos de la Comunidad de Regantes Murada Norte de Orihuela. Esta comunidad, con 160 agricultores propietarios, debe hacer frente anualmente a un gasto de 300.000 euros para elevar el agua desde la toma del canal de la Margen Izquierda del Postrasvase Tajo-Segura, que delimita la parte sur este de la comunidad, para elevarla hasta la balsa situada a 127 metros de altura y desde ese punto regar por gravedad, según explica su secretario técnico, Juan Jesús Rodríguez Ortuño.
Hace un par de años los comuneros vieron la posibilidad de acogerse a un plan de desarrollo rural financiado por la administración autonómica. Compraron los 12.000 metros de suelo agrícola necesario para levantar la planta, junto a la actual han visto aprobada la iniciativa en la que la Generalitat, que ha incluido el proyecto en la ley de Acompañamiento de los presupuestos de 2021, tiene previsto invertir 590.000 euros (impuestos incluidos).
El proyecto contempla la instalación de 896 módulos de silicio en esa parcela capaces de generar 225 kW y operar tres motores de bombeo para elevar hasta 144 metros cúbicos por hora la balsa de riego situada en la zona más elevada de toda la comunidad, para distribuir el riego desde ese punto por gravedad.
Impacto ambiental
Rodríguez Ortuño explica que el uso de esta tecnología será más eficiente si la aportación de recursos al canal se realiza en horario diurno. La fotovoltaica nunca se emplearía para incorporar electricidad a la red. La administración no solo valora la reducción de coste energético de esta opción.
También el hecho de que sea una energía renovable con escaso impacto ambiental. Hasta la llegada del agua del Tajo principios de la década de los ochenta a duras penas se podía sostener el regadío. Ahora la ubicación en altura y la temperatura permite producir cosechas tempranas con la ventaja competitiva que entrar en el mercado de forma anticipada con los mejores precios.
El trasvase permitió desarrollar una agricultura intensiva muy productiva. Pero el costes del bombeo y el riego por goteo a presión es «desmesurado», según argumenta el proyecto a la hora de justificar el cambio tecnológico, que la Conselleria de Agricultura también va a plantear en otras zonas de la Comunidad Valenciana como una alternativa real para reducir costes energéticos.
