La Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) invertirá 1.750.000 euros en el estudio sobre el actual estado del encauzamiento del río Segura a su paso por la Vega Baja. La Dirección General del Agua del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha autorizado al organismo de cuenca la redacción del Pliego de Prescripciones Técnicas del Contrato de Servicios para el estudio integral del estado de conservación y establecimiento de niveles de seguridad del encauzamiento del río, con un plazo de ejecución de 24 meses. Con estos trabajos el organismo persigue realizar una análisis detallado del estado de conservación y de mantenimiento de los distintos tramos encauzados del río en la comarca, dado el plazo transcurrido desde su construcción en los años 90, y la necesidad de haber tenido que actuar en algunos tramos en que se constató una necesidad de mejora de la seguridad estructural, como evidenció la DANA de septiembre de 2019.

El estudio dará al organismo de cuenca una visión de dónde debería actuar para evitar daños como los que produjo la gota fría y la riada, dado que muchos de esos tramos encauzados presentan problemas estructurales. También dará una definición geométrica actualizada del encauzamiento, de sus elementos de protección y puntos débiles e instalaciones auxiliares. Uno de los resultados principales sería un perfil longitudinal de cierta precisión, que permita actualizar la capacidad máxima teórica del encauzamiento por tramos.

Además, con las conclusiones de estos trabajos, la CHS podrá redactar un plan de conservación y mantenimiento anual de la infraestructura, que incluirá la redacción de proyectos de actuación para la reparación de las deficiencias recogidas, o pliegos para la licitación de las mismas. Algunos de estos proyectos pueden tener el carácter de proyectos de restauración.

A esta actuación se comprometió el presidente de la CHS, Mario Urrea, tras los episodios de la DANA de 2019, en que se constató la necesidad de un mejor conocimiento de los últimos tramos del Segura, tanto desde el punto de vista hidráulico, como estructural y geotécnico. Con el citado estudio, según el organismo de cuenca, obtendrá la información precisa para definir las actuaciones a realizar en el río de cara a una mayor resiliencia del mismo para poder afrontar futuros episodios de inundaciones, «proporcionando una menor vulnerabilidad a los bienes y ciudadanos de la Vega Baja», indica la Confederación Hidrográfica del Segura.