El Ayuntamiento de Orihuela ha prorrogado el contrato a la mercantil Talleres Illescas para la reparación y mantenimiento de los vehículos de limpieza viaria y recogida de basuras por 571.081 euros anuales. La empresa oriolana se adjudicó el contrato en 2018 y lo firmó en abril de 2019 por dos años y el consistorio ha decidido hacer efectiva la prórroga de un año que contempla el pliego. El servicio cuenta con 18 camiones de recogida de RSU y solo cinco de ellos son nuevos; el resto tiene entre 12 y 20 años, aunque su vida útil es de 10. A esto se suma que, al no tener la Vega Baja ni plantas de transferencia ni de tratamiento, las basuras se llevan a vertederos de Xixona y Alicante, a 90 kilómetros de Orihuela en el caso del primero. Ese trayecto diario de 180 kilómetros, ida y vuelta, es lo que provoca mayores averías en vehículos diseñados para desplazamientos no muy lejanos. Algunos camiones, en ocasiones, se ven obligados a hacer más de un servicio. Los vehículos recolectores, antiguos y desgastados, se ven sometidos a hacer ese camino «rompe camiones» por lo que cada vez las reparaciones son más habituales y, también, más costosas. El Consorcio de Residuos tiene avanzada la construcción de la planta de transferencia de Dolores, pero no podrán ir todos los municipios. Además, algunos critican el «elevado» precio, de 24 euros por tonelada, que estimaba el proyecto.
