Son inmensas las señas de identidad de la comarca de la Vega Baja del Segura, situada al sur de la Comunidad Valenciana. Sus gentes, su gastronomía, sus tradiciones y costumbres, el entorno natural, el patrimonio artístico, cultural e histórico y el acento marcan las singularidades de esta tierra, compuesta por 27 municipios.

Esta comarca es la ventana a un paisaje único, rico y multicolor en el que la oferta de ocio asociada a la costa se combina con la riqueza cultural y arquitectónica del interior. Una comarca agrícola que cuenta con una de las huertas más productivas y de mayor calidad de toda Europa, que ha sabido complementar con una potente industria turística.

El río Segura es el eje vertebrador de toda la comarca. @ConBeDEbueno

Esta tiene como bandera su huerta, cultivos de frutas, verduras y hortalizas, que dibujan un amplio paisaje de olores, texturas y colores. El blanco e intenso olor a azahar de los naranjos, los verdes de la alcachofa y el brócoli colorean los campos. Toda esta amalgama de colores se puede disfrutar en su conjunto, asomándose a la ventana o balcón que ofrece la sierra de Orihuela y la de Callosa de Segura. Desde arriba se divisan los colores que dibujan la Vega Baja y el río Segura.

Amplia oferta turística cultural y natural

Aunque con una base común, cada pueblo ofrece su particular patrimonio cultural, artístico, medioambiental y gastronómico. Cada uno de los 27 municipios que conforman este territorio se complementan unos a otros, de manera que sustentan una oferta turística amplia. La diversidad paisajística hace que tanto vecinos como visitantes dispongan de un amplio abanico de opciones para disfrutar del patrimonio natural. El río Segura es el eje vertebrador de toda la comarca.

La huerta de la Vega Baja representa un testimonio paisajístico del trabajo de muchas generaciones. @ConBeDEbueno

Las dunas, la huerta, las lagunas y sus pinares junto a la desembocadura del río Segura son reductos de una naturaleza viva en una costa de gran belleza. Por su parte, la huerta de la Vega Baja representa un testimonio paisajístico del trabajo del hombre para afrontar la necesidad de gestionar el agua y garantizar su aprovechamiento.

Más allá del valor patrimonial y el interés turístico de esta arquitectura hidráulica y agraria, existen rutas que atraviesan esta huerta y representan una oportunidad para sumergirse en un paisaje marcado por las técnicas musulmanas, que regulaban no sólo la colonización agraria, sino también las formas de cultivo y la distribución justa y eficaz del agua del río Segura mediante una compleja red de acequias, azarbes y azudes.

Patrimonio natural y deporte

Pero si algo hace diferente a la Vega Baja es su desestacionalización, caracterizada por las condiciones climáticas de la comarca y su orografía que favorecen la práctica de todo tipo de deportes durante todo el año pudiendo realizar actividades de exterior, en especial senderismo, montañismo, ciclismo, running, golf, deportes náuticos, entre otros. Por ello, es el destino perfecto para pasar un día en plena naturaleza en cualquier estación del año. Asimismo, esta comarca apuesta por la valorización del territorio y del paisaje como activo turístico identitario.

El destino perfecto para pasar un día en plena naturaleza en cualquier estación del año. @encar_martinez_algarra

Combinar interior y litoral es la opción ideal tanto para los amantes de la montaña como para los que prefieren la playa ya que dispone de preciosos parques naturales, parajes de ensueño, vías ferratas increíbles o playas kilométricas.

Además, la Vega Baja ofrece diferentes rutas homologadas como la de la «Sierra de Callosa de Segura» que recorre Redován y Cox; la «Senda de la Muela» que pasa por Redován y Orihuela; «La Algüeda» ubicada en Albatera; «El Mirador de la Vega» en Redován, Callosa de Segura y Cox; «La Caldera del Gigante» en Algorfa, Rojales, Almoradí y Benejúzar; «La Huerta de la Vega» en Granja de Rocamora y Cox; «Los Coloraos» en Redován; la «Senda del Poeta Miguel Hernández», con distintos tramos que discurren por la comarca; o el «Sendero Costa Blanca Interior» que transcurre por Guardamar del Segura, Torrevieja, Benijófar, Formentera del Segura, Algorfa, Almoradí, Benejúzar y Orihuela.

El interior de la comarca se complementa con la belleza de la costa. @Symbelmind

Aunque también hay que destacar otros espacios de interés paisajístico como el paraje natural del Cabezo en Benferri, la ruta Alquibla por los paisajes de Bigastro, el parque natural de El Hondo en Catral y en Dolores, el albergue municipal «La Puebla» en Daya Nueva, el área recreativa «El Marco» en Daya Vieja, el Palacio del Marqués de Fontalba en Jacarilla, la ruta «Donde nacen los senderos» en Los Montesinos, el cauce del río Seco en Pilar de la Horadada, el entorno de la huerta en Rafal, la sierra del Molar en San Fulgencio, los palmerales de Orihuela y San Isidro, el entorno natural de Sierra Escalona en San Miguel de Salinas, y el Parque Natural de las lagunas de Torrevieja y La Mata.

Patrimonio cultural

Asimismo, la Vega Baja también se caracteriza por su patrimonio cultural, resaltando la tradición y pasión de la Semana Santa, elementos clave para el desarrollo económico y social. Se trata de bienes que reflejan la identidad del territorio, preservan sus costumbres y, en definitiva, cuentan la historia artística o cotidiana de un lugar.

Por su parte, la Semana Santa de Orihuela, de Interés Turístico Internacional, cuenta con procesiones de imágenes realizadas por Salzillo o Nicolás de Bussi, entre otros, donde la imagen del demonio hermafrodita «la Diablesa», es la única que no atraviesa la iglesia catedralicia. También destacan la Semana Santa de Guardamar, de Interés Turístico Autonómico, La Pasión de Callosa de Segura y Torrevieja, de Interés Turístico Provincial o las de Almoradí y Catral, de Interés Turístico Local.

La Vega Baja destaca también por su riqueza cultural y arquitectónica del interior. @Nanateam10

Otra de las señas de identidad en el plano cultural es el gran número de sociedades musicales, declaradas Bien de Interés Cultural (BIC) por el gobierno valenciano en el 2018, en reconocimiento a su labor como agentes de conservación y potenciación del patrimonio cultural de las tradiciones musicales y artísticas. Estas, galardonadas con numerosos premios regionales y nacionales, ponen los acordes durante todo el año a las distintas manifestaciones culturales.

En definitiva, una comarca con una oferta turística diversa y amplia con un valiosísimo entorno y patrimonio medioambiental y cultural. Una comarca unida por su historia, costumbres y tradiciones únicas.

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