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La CHS cede para riego en la provincia de Alicante solo el 12% del agua que se desala en Torrevieja

La Confederación propone que el 75% de la producción para la agricultura durante los próximos 25 años vaya al Campo de Cartagena - La entidad rechaza la petición de caudales de las cinco principales comunidades de agricultores de la Vega

Imagen de la planta desalinizadora de Torrevieja. | TONY SEVILLA

La mayor parte del volumen de agua para riego de la planta desalinizadora de Torrevieja en los próximos 25 años irá destinada a la comunidad de regantes del Campo de Cartagena (Murcia), según la nueva propuesta de concesión anual de caudales. Esta zona regable, la más importante de todo el trasvase Tajo-Segura, ha solicitado 70 hectómetros anuales y la resolución le otorga 59,4.

La decisión de la oficina de planificación de la Confederación Hidrográfica del Segura distribuye un potencial de producción de 80 hectómetros anuales. 40 de los que ya entrega anualmente ahora la desalinizadora, más los 40 de su futura ampliación, en periodo de redacción del proyecto. Casi 60 se van al campo de Cartagena, el 75% para 32.000 hectáreas de cultivo. Una zona de riego en ojo del huracán por los problemas ambientales derivados de la explotación intensiva y su impacto en el Mar Menor. La provincia de Alicante, con casi doble de hectáreas en producción de superficie de riego del Tajo infradotada, 59.000 hectáreas -y para la que se construyó la desalinizadora-, solo obtiene 10 hm2. Los otros diez van a otras comunidades de regantes de Murcia.

En la provincia de Alicante la CHS ha aceptado, con condiciones, las peticiones de 18 comunidades, la mayoría de pequeñas y medianas y ha denegado por «incompatibles» las realizadas por otras cinco, que coinciden con las más importantes de la comarca de la Vega Baja. El organismo de cuenca justifica la negativa en que esas comunidades cuentan con recursos concedidos de aguas regeneradas de depuradora, de menor calidad que las desalinizadas pero sin coste. Según el criterio de la Confederación (y no de los regantes), aquellos serían suficientes para resolver el déficit de dotación de los caudales procedentes del trasvase Tajo.

Las comunidades a las que se les niega el agua desalinizada son Margen Derecha de Pilar de la Horadada (dos mil hectáreas), Santo Domingo (Jacarilla, Los Montesinos, Algorfa, Orihuela), La Dehesa de Orihuela, Campo de Salinas en San Miguel y la Comunidad de Regantes de San Miguel con más de 7.000 hectáreas de riego y miles de comuneros afectados por la decisión, que ha sido recurrida. Las 18 comunidades de regantes de la provincia, ubicadas mayoritariamente en la Vega Baja, y de pequeño y mediano tamaño suman, apenas 10 hm3 anuales. Incluidos los 5,1 de la Comunidad de Regantes de Riegos de Levante Margen Izquierdo de Elche y Crevillent, que sí ha visto aceptada su petición en su integridad. La CHS abrió en junio 2020 las plicas presentadas de proyectos para la concesión de ese volumen máximo anual de 80 hm3. Se presentaron 67 solicitudes, de las que 10 fueron excluidos porque además de incluir superficies si afectadas por el Trasvase incorporaban otras ubicadas fuera de esos perímetros. Las 57 comunidades de regantes del SCRATS que presentaron solicitudes han reclamado 167 hectómetros de agua desalinizada. Más del doble de los que puede producir ahora la planta de Torrevieja. El volumen total solicitado en el conjunto de las 57 peticiones asciende a 167 hm3/año, algo más del doble de que ahora resulta susceptible de ser concedido. La CHS proponía además en las bases de esta concesión a las comunidades la posibilidad de renunciar a la explotación de aguas subterráneas a través de pozos que tienen concedidas a cambio de ser compensados con más caudales desalinizados. Una estrategia que buscaba reducir la sobreexplotación y contaminación de estos acuíferos y su impacto ambiental. Pero ninguno de los proyectos presentados ha renunciado a esos caudales.

Conexión directa de la planta con 15.000 hectáreas

La mayoría de regantes de La Murada, Albatera o Elche obtienen caudales pese a carecer de tuberías

Aunque se dice que ninguna comunidad de regantes de la provincia tiene conexión directa a la desalinizadora, no es cierto. Más de la mitad de la superficie destinada a riego del Tajo-Segura en la Vega Baja cuenta con conexión directa con la planta desalinizadora -en torno a 15.000 hectáreas- a través de los canales del postrasvase del campo de Cartagena y La Pedrera. Son todas las situadas en la margen derecha del Segura, desde Guardamar a Rojales, pasando por Los Montesinos, Jacarilla, Hurchillo, Algorfa, Bigastro, Orihuela Costa, San Miguel de Salinas y Pilar de la Horadada. No cuentan, eso sí, con esta infraestructura de canalizaciones otras 15.000 hectáreas ubicadas en la Margen Izquierda del río Segura -La Murada (Orihuela), Benferri y Albatera-, ni las 29.000 de Riegos de Levante en Elche y Crevillent. Paradójicamente la totalidad de las comunidades que carecen de esa conexión en la margen izquierda han solicitado caudales y han sido concedidos, aunque condicionantes.

El informe de la CHS también hace referencia a este problema de infraestructuras. La resolución de la Confederación recuerda que «dicha circunstancia no constituye por sí misma un obstáculo que haga inviable esas solicitudes, al encontrarse expresamente prevista en las disposiciones normativas del plan la posibilidad de suministrar el agua a las zonas regables mediante permuta con otro recurso».  

Es decir, a falta de las conexiones en proyecto, si por la infraestructura del postrasvase discurren recursos propios de la cuenca o del Tajo se pueden permutar por los de la desalinizadora.

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