Sustituir cañas por especies arbóreas autóctonas en el Segura para mejorar su funcionalidad hidráulica. Es el proyecto que desarrollará la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) para la mejora del río y que este martes presentó en Orihuela en un acto abierto a la participación del público asistente. La actuación se llevará a cabo aguas arriba del núcleo urbano de Orihuela, entre el centro comercial Ociopía y el Molino y tiene por objeto la eliminación del cañaveral que, en algunos tramos, impide la circulación correcta del agua, y recuperar el bosque de ribera que había antaño.
La eliminación del cañaveral que crece en los márgenes del río permitirá la mejora de la funcionalidad hidráulica del río Segura.
Una actuación muy esperada y demandada desde hace años en el cauce del río. A la jornada de presentación del proyecto, celebrada en la antigua aula CAM de Orihuela con la colaboración del Ayuntamiento, acudieron vecinos y miembros de asociaciones conservacionistas que tuvieron la oportunidad de plantear sus dudas y sugerencias, así como propuestas, que el organismo de cuenca se comprometió a atender. No es habitual que la CHS se someta a la participación pública.
3.000 árboles que se plantarán en los márgenes para recuperar el bosque de ribera
La actuación prevista pretende mejorar la funcionalidad hidráulica del cauce al eliminar las cañas y el carrizo que se acumulan en puentes y azudes, disminuyendo la sección hidráulica, y su sustitución por especies autóctonas que, además de mejorar desde el punto de vista ambiental el tramo del río Segura, son más resistentes al arrastre en caso de avenidas. Estas especies se plantan con baja intensidad para evitar que afecten, precisamente, a la funcionalidad hidráulica del cauce. Las especies que se utilizarán para eliminar a las invasoras son tanto arbóreas como de porte pequeño. Así, se plantarán olmos, álamos, fresnos, lirios amarillos, adelfas y almez.
La actuación del organismo de cuenca plantará 3.000 árboles en ambos márgenes del río Segura, aguas arriba del núcleo urbano de Orihuela, en un tramo de dos kilómetros. En la parte superior, las nuevas especies llevarán riego por goteo con agua regenerada. El presupuesto de la restauración de la ribera del río asciende a 144.077 euros y está prevista su ejecución en un plazo de 15 meses por la empresa Tragsa.
Se van a emplear dos técnicas en la eliminación de las cañas. Por un lado, con el sombreado con lámina de polietileno durante, al menos, 9 meses, lo que someterá al rizoma (parte subterránea de la caña) a una falta de luz y a temperaturas de hasta 80º que hará que se deseque y muera. Por otro, se hará un desbroce reiterado consistente en la eliminación manual, cada cuatro o cinco semanas, lo que debilitará las cañas y permitirá el desarrollo de las especies autóctonas que se van a plantar.
La actuación se hará en dos sectores diferenciados. Uno en la orilla del río, donde está el carrizo, especie invasora domina todo y que, cuando se corta, llega a los puentes y crea bardomeras que, muchas veces, son la causa de las inundaciones. Allí se plantarán sauces y vegetación de ribera muy flexible, que arraiga fuerte y no se va en caso de avenida. También herbáceas que luchan contra la caña y el cañizo. En la parte alta, por su parte, la CHS pondrá árboles de ribera, como olmos o álamos, que darán mucha sombra, reducirán temperatura y fijarán CO2.