Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El PAT de la Vega Baja señala que la comarca debe reducir a la mitad su suelo urbanizable para que su desarrollo sea sostenible

El planeamiento considera que el territorio solo puede asumir 12 millones de metros residenciales frente a los 24 que suman los 27 municipios de la comarca - El proyecto, que saldrá a exposición pública, protege la huerta tradicional

Imagen panorámica de una zona turístico residencial del litoral de Orihuela Costa TONY SEVILLA

Los redactores del Plan de Acción Territorial de la Vega Baja (PAT) consideran que el territorio del Bajo Segura no puede soportar su actual previsión de urbanización y construcción de vivienda sobre 24,1 millones de metros cuadrados, consagrada sobre todo al turismo residencial. El documento con rango supramunicipal desde el punto de vista urbanístico y que va a entrar en fase de exposición pública para su aprobación definitiva, contempla rebajar esa cifra a la mitad: 12,3 millones de metros cuadrados. Un cálculo que se realiza además aplicando la estrategia territorial de la Comunidad Valenciana, aprobada en 2011, y con lo que dispone la LOTUP, con distintas variables, en las que sobre todo tienen peso específico los criterios demográficos y la superficie que ya se encuentra urbanizada en cada uno de los municipios y en el conjunto del territorio.

Es lo que se trasladó en la reunión que convocó la secretaria autonómica Inmaculada Orozco a colectivos conservacionistas de la comarca para explicar el documento, como Amigos de los Humedales del Sur de Alicante (AHSA) y Amigos de Sierra Escalona (ASE). El documento comenzó a fraguarse hace un par de años y en unos día podría salir a exposición pública para su posterior aprobación. La Generalitat no hizo públicos estos datos cuando dio a conocer el mismo proyecto a los alcaldes de la comarca convocados en Jacarilla el pasado 6 de junio.

Ante esta reducción tan relevante de la superficie susceptible de ser urbanizada, la Generalitat reconoce que pretende una «tercera vía», por la que se podrían considerar algunos proyectos de viviendas como «actividad económica». Algo que exigió el sector de la promoción inmobiliaria de la comarca a través de un manifiesto cuando se daban los primeros pasos para iniciar la adjudicación y redacción del plan en 2018. Ante las preguntas de los ecologistas sobre esta posibilidad, que rechazan, la secretaria autonómica aseguró que sería una vía restrictiva a la que solo podrían acogerse algunos suelos. Miguel Ángel Pavón, en representación de ASE y AHSA, lamentó que en esta propuesta no se contemple proteger suelos todavía no urbanizados pero urbanizables como Cala La Mosca entre otros enclaves ,y explicó que la diferencia entre los terrenos que los municipios contemplan como urbanizables y los que el PAT cree sostenibles para ser desarrollados, solo se puede resolver desclasificando suelo.

La medida no es nada sencilla desde el punto de vista legal ni económico, pero es la única que puede garantizar la sostenibilidad del territorio, en opinión de Pavón. AHSA criticó el modelo del turismo residencial y planteó la inquietud de los conservacionistas «por el futuro de ese tejido turístico residencial, que puede convertirse en ciudades fantasma, sin habitantes, a largo plazo».

Otro aspecto muy importante del mismo documento es la consideración de la huerta tradicional como parte de la infraestructura verde de la Comunidad, lo que se traducirá en un grado de protección muy importante para este territorio equivalente al que disfruta la huerta de València con su propio PAT. La de la Vega Baja ocupa 15.000 hectáreas aunque para concretar hasta qué punto contempla el documento esta y otras zonas habrá que esperar a su exposición pública.

Suspensión de planes generales y programas

La fase de análisis público que comienza la semana que viene paraliza la aprobación de proyectos

La secretaria autonómica de Territorio y Urbanismo, Inmaculada Orozco, junto al técnico Vicente Domenech y los redactores del plan, aseguró el jueves que la exposición pública del Plan de Acción Territorial de la Vega Baja (PAT) supondrá la paralización de la aprobación de nuevos planes urbanísticos, aunque estén en fase final de tramitación, hasta que el documento del PAT sea definitivo y entre en vigor. Esa fue una cuestión planteada por Amigos de los Humedales del Sur de Alicante y Amigos de Sierra Escalona, que junto a colectivos como Ecologistas en Acción o Segura Transparente, además de algunos representantes de regantes de la huerta, fueron convocados para la presentación del plan.

Pese a la relevancia para el futuro de la comarca del documento, la Generalitat ha preferido realizar presentaciones sectoriales. Lo hizo en Jacarilla, aunque sin que los alcaldes, al margen su signo político, puedan disimular que es una legislación que no les entusiasma porque siguen sin renunciar al urbanismo como motor de crecimiento. También se ha presentado de forma separada a promotores, tejido empresarial y abogados urbanistas. Una estrategia que ha evitado posturas enfrentadas en una misma exposición.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats