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Bandera negra para Cala Mosca por la urbanización del último kilómetro virgen

Ecologistas en Acción impone el vergonzoso distintivo a esa zona costera de Orihuela, donde se prevé construir 1.500 viviendas, por la «mala gestión»

Área de Cala Mosca, en Orihuela Costa, donde se pretende construir 1.500 viviendas. | TONY SEVILLA

Como cada verano, la organización Ecologistas en Acción ha publicado el informe «Banderas Negras», donde clasifica las 48 peores playas por su contaminación o gestión ambiental tras analizar casi 8.000 kilómetros de costas españolas. Este año, ha entrado en ese informe de la vergüenza Cala Mosca, el único espacio litoral de Orihuela que no se encuentra urbanizado, pero sobre el que hay un proyecto de urbanización que cambiará por completo su fisonomía. Por este motivo, la organización ecologista ha decidido darle este distintivo, justificándolo por la «mala gestión» ambiental de este espacio único.

Ecologistas en Acción pone de relieve la urbanización del último kilómetro virgen del municipio de Orihuela, con el Plan Parcial y proyecto de urbanización de la UE-2 del sector D-1 «Alameda del Mar» del PGOU de Orihuela. Cala Mosca, destaca la organización, cuenta con grandes valores ambientales y paisajísticos, en peligro por la construcción de cientos de viviendas que se cierne sobre ella. El sector D-1 Cala Mosca y la Campana fue declarado urbanizable en el PGOU de 1990 y no fue sometido a evaluación ambiental. En 1998 fue aprobado definitivamente el Plan Parcial de ese sector y en 2003 se urbanizó la Unidad de Ejecución 1. En 2005 se tramitó el PAI de la UE-2, y en 2007 se aprobó y se adjudicó el programa a la mercantil Playa Salvaje S.A.

En el desarrollo de las obras de urbanización se detectó la presencia en el sector de flora y fauna amenazada y protegida, en especial la planta Heliantemum caputfelis (Jarilla de cabeza de gato) y el caracol Tudorella mauretanica. En 2012, la Conselleria de Medio Ambiente decidió evaluar ambientalmente el Proyecto de Urbanización y obligó al promotor a rehacerlo, dado que en el que ya se aprobó en 2007 no se tuvo en cuenta la existencia de flora y fauna amenazada. En 2014, Ecologistas en Acción presentó alegaciones donde se especificaba que la legislación ambiental aplicada en el Estudio de Impacto Ambiental estaba derogada y que había una valoración errónea de los impactos del proyecto urbanístico sobre las poblaciones de flora y fauna amenazada y la afección a una Vía Pecuaria.

La organización ecologista pone de relieve que se ha reactivado el proyecto con la oposición ciudadana y de algunos partidos políticos como Cambiemos y CLARO, que denuncian que desde el área de Urbanismo del Ayuntamiento no se estén requiriendo todos los informes pertinentes para que se pueda aprobar en pleno la modificación puntual de este plan parcial que prevé la construcción de 1.500 viviendas en Cala Mosca sobre 456.000 metros cuadrados. Según señala Ecologistas en Acción en el informe, «parece que desde Urbanismo se han elaborado informes sobre planeamiento para la modificación parcial», lo que se denuncia como un interés por parte del equipo de gobierno de PP y Cs de acelerar los trámites para que se presente a pleno cuanto antes.

En la Declaración de Impacto Ambiental -favorable- ya se indicaba que el agente urbanizador debía subsanar una serie de aspectos, tales como suprimir algunos viales, la elaboración de un estudio de especies amenazadas, y la restauración vegetal de las zonas que se liberaban del tránsito peatonal, entre otros. El último revés que ha sufrido la mercantil Gomendio, promotora del proyecto de urbanización, es la emisión de un informe de la Dirección General de Carreteras en el que determina como desfavorable la construcción de este proyecto. La organización ecologista propone al consistorio oriolano, en base a todas las irregularidades surgidas en el proceso administrativo, que desestime la aprobación de la urbanización de la única zona virgen del litoral de Orihuela, que ya tiene una alta saturación de viviendas residenciales.

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