El nuevo carril bici que unirá el casco urbano de Orihuela con la zona residencial de Montepinar estará operativo a mediados de agosto, según anunció ayer el equipo de gobierno tras una visita a las obras. Esta nueva infraestructura de cerca de dos kilómetros unirá la carretera CV-870, a la altura de la rotonda de la nacional 340, con la CV-868 hasta el cruce de Montepinar y tiene un coste de 227.480 euros. La empresa adjudicataria Aglomerados del Sureste. Se va a pavimentar además del carril bici toda la calzada, es decir, el ancho completo de la carretera, según el Ayuntamiento. Se han realizado también seis imbornales y se ha cambiado el peralte de la carretera para evitar que haya acumulación de agua sobre todo en la parte interior.
Además de la señalización con pintura horizontal tendrá también una sección vertical donde se colocarán unos hitos delimitadores del carril bici para dar seguridad al ciclista.
El alcalde de Orihuela Emilio Bascuñana (PP) y el concejal de Medio Ambiente, Dámaso Aparicio explicaron que el 10 de junio se firmó el acta de replanteo y los trabajos «marchan a un ritmo muy bueno, por lo que si no pasa nada los vecinos tendrán a su disposición este nuevo vial prácticamente con 20 días de antelación a la fecha prevista que era el 10 de septiembre». Sobre el 15 de agosto la carretera podría estar abierta.
Las mismas fuentes aseguraron que esta obra tendrá después su continuidad en la siguiente fase que va a realizar la Diputación de la que ya se ha redactado el proyecto para unir Orihuela con Hurchillo; Hurchillo con Arneva; y luego con Bigastro.
