La Policía Local de Torrevieja ha detenido a un conductor de unos 50 años como presunto autor del atropello sufrido el martes por un peatón en el mismo paso de cebra donde un día antes murió arrollado un matrimonio. El conductor se dio a la fuga sin prestar auxilio al peatón y fue arrestado el miércoles por la noche tras ofrecer una versión inverosímil sobre lo ocurrido que no concuerda con el testimonio de los testigos. El arrestado quedó en libertad tras instruir la Policía Local las diligencias por el atropello y la denegación de auxilio.
El accidente ocurrió sobre las once de la noche del martes en un paso de peatones de la avenida Desiderio Rodríguez de Torrevieja. Un hombre resultó herido grave al ser atropellado y el vehículo, según testigos del accidente, continuó su marcha sin detenerse a prestar auxilio al hombre arrollado.
El conductor del coche implicado en el arrollamiento siguió circulando hasta llegar la localidad murciana de San Javier, donde reside. Allí acudió a la Policía para denunciar que su coche había sufrido daños al recibir el impacto de una persona atropellada por otro turismo. Sin embargo, le remitieron a la Policía Local y tras acudir a las dependencias policiales de Torrevieja acabó siendo detenido tras prestar una declaración sobre lo ocurrido que no concordaba con los datos aportados por testigos del atropello.
El conductor manifestó a los agentes que él no había sido el autor del atropello, sino que el peatón había sido arrollado por otro turismo y del impacto salió despedido golpeándose contra el suyo y ocasionándole daños, según fuentes municipales.
La Policía Local procedió a su detención, ya que los testigos señalaron a su vehículo como el único implicado en el atropello. Tras su arresto se dio cuenta al juzgado y quedó en libertad. El peatón seguía ayer ingresado en el hospital pero se mantiene estable.
Vecinos de la zona donde se han producido los dos atropellos reclaman un semáforo para resolver el problema y cuestionan que el Ayuntamiento solo haya puesto una banda para reducir velocidad. «Esto es una tirita para un gran problema que el Ayuntamiento no quiere ver desde hace años», afirma una vecina.
