¿Está la concesionaria del departamento de salud de Torrevieja rebajando su nivel de actividad ante la expectativa del fin del contrato el próximo 15 de octubre? Ribera Salud lo niega con rotundidad pero algunos alcaldes de los diez municipios que integran el departamento aseguran que es «evidente» que esta merma en su disposición de medios materiales y humanos se está produciendo. Lo anticiparon las denuncias de los sindicatos que este verano se encontraron con un plan de refuerzo de Urgencias «adelgazado» frente al de otros años, provocando jornadas de colapso en el servicio de boxes y observación que muchos facultativos no recordaban en el Hospital Universitario de Torrevieja en 15 años.
Esta situación que se arrastra desde hace unas semanas se evidencia en departamentos de especialidades como traumatología, oftalmología o pediatría, en los que los facultativos titulares han cogido vacaciones, con lo que estas áreas se han quedado cubiertas exclusivamente médicos residentes en formación. También se ha dejado notar en el volumen de pruebas diagnósticas como ecografías, mucho menor durante estas semanas con respecto al año anterior. Según ha podido constatar INFORMACIÓN, Ribera ha recibido una petición formal de explicaciones por parte de la Generalitat sobre estas circunstancias, aunque Sanidad no lo confirma.
Pese a que la dirección del departamento niega esta «ralentización» de la atención sanitaria, para el alcalde de Guardamar del Segura, José Luis Sáez (PSOE), es «está claro que se está produciendo»: su ayuntamiento ha tenido esta semana que acudir directamente a la Conselleria de Sanidad para restituir la asistencia en el consultorio auxiliar del Campico. En este centro de atención de la pedanía guardamarenca el departamento había decidido no renovar el contrato a la médico de atención primaria, por lo que los usuarios estaban siendo derivados al centro de salud de Guardamar. «Es lógico que la concesionaria ponga ahora 3 donde ponía 8 si va a dejar el departamento», explica, «da la impresión de que quieren que se identifique el cambio con una peor asistencia sanitaria, y todavía nos falta un mes», se lamenta Sáez. Las quejas también llegan desde municipios gobernados por el PP, aunque en declaraciones anónimas. «Se están aplazando citas a después del 15 de octubre y en los centros de salud y consultorios el trabajo se acumula. Lo que más se nota es que Ribera no responde ya cuando hay incidencias», indican desde uno de esos municipios.
La gerencia niega «los rumores» y asegura que va a prestar el servicio de calidad hasta el último día
Para Ribera Salud «independientemente de los rumores que puedan circular», el departamento de salud no «ha reducido su ritmo de actividad debido a la finalización del contrato el próximo 15 de octubre. Hemos ofrecido la mejor atención posible durante todo el periodo concesional y seguiremos haciéndolo hasta el último día en que la gestión esté en nuestra mano», aseguran desde la gerencia. Eso sí, añaden que «la compleja situación que vive el sector a nivel nacional de escasez de recursos afecta también a Torrevieja, lo puede generar demoras puntuales en algunos servicios, así como la dificultad para contratar profesionales que se agrava con la imposición de conselleria, que no nos permite ofrecer contratos con continuidad más allá del 15 de octubre». Ribera asegura que Torrevieja «lleva años siendo el de menor demora media de la Comunidad Valenciana, y habrá que ver si sigue siendo así en el futuro si cambia en la gestión».
En cuanto a la contratación de personal eventual a partir del 1 de octubre, la mismas fuentes indica que la dirección «está evaluando en estos momentos esta situación en base a la actividad asistencial prevista, la necesidad de personal en esas fechas y las limitaciones legales de contratación temporal». Desde la dirección del departamento de salud de Torrevieja «queremos reiterar que todos nuestros profesionales están volcados por seguir ofreciendo la mejor atención sanitaria».
