La Conselleria de Sanidad ha decidido que los 60 médicos que ejercen en el departamento de Torrevieja con contratos fijos sin especialidad se mantengan en sus funciones de forma excepcional y con sus actuales condiciones contractuales «salvo» si su plaza es reclamada por un facultativo con especialidad. Según explicó ayer el comité de empresa, la dirección de Recursos Humanos de Sanidad ha informado que la fórmula contemplada para la «subrogación» de los médicos sin especialidad MIR será «una resolución que de forma excepcional y temporal» permita que siguieran en sus condiciones contractuales actuales, «con la salvedad» de que si algún médico con cualquier especialidad solicita la plaza «se irían a la calle, es decir dejarían de ser fijos».
La decisión afecta, sobre todo, a médicos de Urgencias -casi el 70% de la plantilla de ese servicio, uno de los que soporta mayor presión asistencial de la Comunidad y formado por 27 facultativos-, médicos de Familia, concentrados de varios centros de salud, y médicos de la Unidad de Hospitalización Domiciliaria.
Ante esta decisión el comité de empresa ha convocado una manifestación este viernes a las 14.30 en la puerta de Urgencias del Hospital Universitario de Torrevieja «a la que se convoca a todos los compañeros y a la población para manifestar la exigencia a la Conselleria de que subrogue a todo el personal que venía ejerciendo sus funciones antes de la reversión».
La Generalitat había mantenido cierta expectativa de que iba a resolver el conflicto laboral asumiendo las peticiones de los médicos afectados. Su anuncio ha caído como un jarro de agua fría porque aunque figurarán jurídicamente como personal laboral fijo los convierte «de facto» en interinos, cuando alguno de ellos lleva ejerciendo con contrato fijo en el centro sanitario más de una década. Sanidad les indicó la semana y media de haberse iniciado la gestión directa que debían cesar en su cargo, integrarse en la bolsa de empleo y optar de nuevo al puesto que desempeñaban. Algo que rechazaron de plano. Estos médicos recuerdan que no van a renunciar a sus derechos laborales -como la indemnización por despido-; y mantienen que la responsabilidad de esta situación de limbo jurídico es de Sanidad, que los incorporó en listado de subrogación sin condicionantes como al resto de los más de mil sanitarios que ha asumido la Generalitat con el proceso de reversión.
Ayer a primera hora uno de los dos médicos coordinadores de Urgencias, que había asumido el cargo hace escasos días, cesó del cargo voluntariamente tras conocer la resolución para «tomar tiempo y esfuerzo» en defender los derechos de los trabajadores afectados, entre los que se encuentra.
Cumplir la ley
La Generalitat se ha escudado en la falta de información de Ribera Salud a la hora de justificar la situación de estos médicos. Según Sanidad cuando asumió la gestión desconocía el número de médicos sin especialidad que ejercían en el área. Y ha aclarado que la legislación impide realizar un contrato fijo a un médico no MIR aunque sí puede contratar a través de bolsa de empleo a médicos en interinidad que carezcan de la especialidad cuando no haya aspirantes con especialidad. Sanidad insiste en que ha explorado todas las alternativas y recuerda que entiende la situación de los médicos afectados pero recuerda que no puede incumplir la ley. Y que el personal estará subrogado a todos los efectos -con la salvedad de la reclamación de la plaza- mientras que con Ribera podían ser despedidos.
