La empresa que realiza el mantenimiento de parques y jardines para el Ayuntamiento de Orihuela en la Costa ha improvisado un recinto donde acopia desde hace semanas toneladas de podas y todo tipo de restos vegetales en medio de una zona residencial y frente al CP Los Dolses. Lo ha hecho con el visto bueno del Ayuntamiento, aunque no exista rastro administrativo de la decisión, porque el suelo, situado en paralelo a la avenida de Nicolás de Bussi, es de titularidad pública municipal. Buena parte de la parcela de 14.000 metros cuadrados, que acogió durante más de quince años el instituto Playa Flamenca en barracones, ha sido vallada. La valla se ha cubierto con una rafia que oculta la actividad que se desarrolla en el interior.
El gobierno local elude informar acerca de un uso sobre suelo público que necesita de informes y autorizaciones previas
Los camiones de la empresa Actúa (antiguo Grupo La Generala) acumulan día a día, desde hace aproximadamente un mes, podas, troncos y restos vegetales de todo tipo de las labores de mantenimiento de las zonas verdes del litoral en las que viven 30.000 vecinos. El terreno escogido está rodeado de urbanizaciones turístico residenciales, donde los vecinos esperan desde hace años una adecuación con dotaciones públicas -aunque ahora lo que está previsto es ampliar el colegio-. Cualquier tipo de actividad de almacenaje y tratamiento de residuos requiere de una autorización ambiental de la administración autonómica. El equipo de gobierno de coalición PP-Cs no ha respondido a las peticiones de este diario de información sobre la situación legal del recinto sobre suelo municipal. Tampoco el concejal responsable del área, Ángel Noguera, se ha pronunciado sobre la instalación.
Fuentes municipales señalan que sobre el terreno se está desarrollando una actividad de acopio y posible tratamiento posterior de residuos. Una especie de planta de transferencia en precario. Algo que requiere de un proyecto previo e informes técnicos del propio Ayuntamiento y la administración autonómica y una tramitación de meses. Extraoficialmente la empresa y el personal municipal del área de Infraestructuras ha indicado a los vecinos que el acopio es «temporal» y que en el momento que las podas, la mayor parte procedente de palmeras datileras y pinos, se sequen al sol «se irán triturando» en el propio recinto. El objetivo es utilizar ese material vegetal en los propios parques de Orihuela Costa.
Ha sido el Partido de la Costa-Claro el que ha denunciado públicamente este vertido, que preocupa a los vecinos por el «peligro latente de un incendio» y la proliferación de plagas que puede generar. La misma fuente califica la actividad de «vertedero urbano» y ha recordado que lleva «años» solicitando un ecoparque al gobierno de Orihuela. Claro, aliado de Cambiemos en el Ayuntamiento, pedirá explicaciones en el próximo pleno al concejal responsable Ángel Noguera «instándole a que de manera urgente limpie la parcela».
La práctica habitual en la gestión de podas en los municipios es transportar los restos a una planta autorizada -que cobra a las empresas un canon de eliminación por tonelada-. Las mercantiles a su vez cargan ese coste a los ayuntamientos. En el caso de la Vega Baja se realiza esa eliminación en la Región de Murcia o de otras comarcas de la provincia de Alicante, con importante gasto den transporte y canon de eliminación.
Actúa realiza la prestación en Orihuela Costa sin contrato desde febrero de 2017. Cinco años fuera de la legalidad administrativa. Los pliegos del contrato agotado -fechados en 2011- dispondrían que la gestión de restos vegetales se realice en un gestor autorizado.
El Ayuntamiento paga actualmente por este servicio en la costa oriolana 900.000 euros al año. La empresa buscaría con esta actuación ahorrar en costes. Reducción que debería repercutir también en las certificaciones que paga el Ayuntamiento. La parcela es la proyectada por la Generalitat para llevar a cabo la ampliación del colegio Los Dolses sobre 8.000 metros cuadrados. Uno de sus extremos es recorrido por una rambla que desemboca al norte de Playa Flamenca.
Un contrato que no llega
Un informe sobre cómo debería ser la nueva prestación señala que si quiere cubrir el cien por cien de todas las zonas verdes, el municipio debe asumir un coste anual de 2.181.000 euros (IVA incluido) para cubrir 115 hectáreas de zonas verdes -1.150.000 metros cuadrados-, incluido también el mantenimiento de todas las zonas de seto y arbolado de alineación en aceras y medianeras entre viales de diferente sentido, rotondas de tráfico, taludes, y todo tipo de isletas viarias municipales. Este servicio solo cubre ahora un 35% de la superficie de zonas verdes públicas de Orihuela Costa.
