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PSOE y Ciudadanos ya tienen pactado un presupuesto "urgente y social" para Orihuela

La nueva coalición sostiene que "en tan solo unas semanas se van a desbloquear cuestiones clave"

José Aix (Cs) y Carolina Gracia (PSOE), en el momento de registrar la moción de censura en el Prop TONY SEVILLA

Después del terremoto político en Orihuela, que los implicados describen como “días complicados y de tensión”, el ambiente general es que unos están contentos y otros enfadados pero casi nadie sorprendido por la ruptura de PP y Ciudadanos como equipo de gobierno en lo que muchos califican como el relato de un divorcio anunciado después de que los desencuentros fueran en aumento desde que firmaron un pacto en 2019. Desavenencias y cruces de acusaciones que han paralizado la gestión en el Ayuntamiento ante una mayoría ficticia que en la práctica se traducía en la imposibilidad de alcanzar acuerdos, incluso en una herramienta imprescindible como los presupuestos, que llevan prorrogados desde 2018.

Para sacar adelante las cuentas de este año, los populares optaron en las últimas negociaciones por no convocar a sus socios y buscar el apoyo de la oposición, que lo ofreció a cambio de su separación de la formación naranja. Ahora, tras la moción de censura que han firmado PSOE, Ciudadanos y Cambiemos para sacar de la Alcaldía a Emilio Bascuñana, que la coalición da por hecho que se aprobará en el pleno extraordinario, ya notificado para el 25 de abril, la prioridad es esa. Según fuentes consultadas, "la primera medida y más importante será aprobar un presupuesto urgente y rápido de marcado carácter social", algo que esperan que se produzca en el primer mes del nuevo bipartito.

A un año de las elecciones, las mismas fuentes reconocen que hay un margen estrecho de acción, al mismo tiempo que se muestran seguros de que "vamos a trabajar bien". De hecho, sostienen que "en tan solo unas semanas se van a desbloquear cuestiones clave", porque "tenemos muchos puntos de unión", siendo "la política social el hilo conductor" entre las tres formaciones. Atrás quedaron el tirarse los trastos a la cabeza, "cosas de política" -explican-, y en ese horizonte "podremos demostrar que hay una alternativa a la ola PP-Vox que recorre todo el país, con una línea de trabajo diferente a la extrema derecha".

El acuerdo, que harán público en los próximos días, es entre los socialistas y el partido naranja. A su vez, el PSOE ha conseguido el apoyo de Cambiemos como "partido colaborador". No en vano, aunque este último no entre en el gobierno, suman tres concejales a los 6 de los socialistas y los 5 de Ciudadanos. En total, 14 frente a los 9 del PP y 2 de Vox. El equipo estará liderado por la socialista Carolina Gracia como alcaldesa. En las concejalías se prevén pocos cambios. José Aix (Cs) se mantendría como vicealcalde y concejal de Urbanismo, que asumiría también Patrimonio, algo que ya había reivindicado en su pacto con el PP, que finalmente se hizo con esa concejalía.

Los otros cuatro ediles de su partido seguirían con las áreas que hasta ahora venían dirigiendo, algunas de las más importantes de un ayuntamiento como Infraestructuras, Recursos Humanos, Cultura, Seguridad Ciudadana o Playas. Los concejales del PSOE, por su parte, se harían con el control de los departamentos actualmente en manos del PP. Salvo Festividades, que lideraría Antonio Sánchez (Cs) a cambio de entregar Educación al PSOE.

Cambiemos, por su parte, ha exigido una garantía de "coordinación, desarrollo y seguimiento del acuerdo", pactando con la formación socialista realizar reuniones, como mínimo, cada tres meses, para poner en común los temas relacionados con la gestión de las distintas áreas de gobierno.

Con todo, después de que Ciudadanos haya abierto expediente a los cinco ediles oriolanos por saltarse "todas las líneas rojas", si finalmente son expulsados del partido, también podría ocurrir que Gracia cogiera el bastón de mando con el apoyo de ediles tránsfugas.

Reestructuración del equipo de gobierno

Mientras, el alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana, ha anunciado la reestructuración del equipo de gobierno. Alcaldía se reserva las competencias de Urbanismo y Planeamiento, Recursos Humanos y Régimen Interior, Seguridad Ciudadana y Educación. El edil Víctor Valverde asume Infraestructuras, Servicios y Mantenimiento, Parques y Jardines, Agua y Alumbrado Público, mientras que el concejal Rafael Almagro suma a sus áreas la de Cultura. Dámaso Aparicio asume Juventud y Playas. El resto de concejales mantienen sus competencias como hasta ahora. Además, la junta de gobierno local pasa a estar formada por el grupo popular (alcalde y 8 concejales), mientras que el portavoz será Almagro.

"Cuando dijo que nos echaba ya nos habíamos ido"

Al mismo tiempo que PSOE y Ciudadanos registraban en el Prop la moción de censura para derrocar a Emilio Bascuñana, este anunciaba que rompía el pacto con la formación naranja y expulsaba a sus cinco concejales del gobierno. Sin embargo, fuentes de Ciudadanos indican que "cuando dijo que nos echaba ya nos habíamos ido". En torno a las 12.00 horas entraron en el registro del Ayuntamiento las dimisiones de los ediles de Ciudadanos. Media hora después, Bascuñana comunicaba su decisión ante los medios de comunicación. Hubo quien incluso pensó que iba a dimitir como alcalde, lo que hubiera paralizado la moción y obligado a convocar una investidura. La notificación del cese les llegó a los concejales en torno a las 14.30 horas. "Lo hicimos previamente al anuncio de que nos echaba, puesto que no tenía sentido presentar una moción estando en el equipo de gobierno", insisten.

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