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Almoradí inicia las demandadas obras del colector de pluviales

La actuación comenzará el próximo martes en la calle Don Pelayo y continuará en la Plaza de la Libertad, las calles Gregorio Martínez, Gloria Fuertes y Azarbe del Calvario y avenida de Algorfa

Reunión de trabajo en el Ayuntamiento para abordar el plan estratégico del municipio

Almoradí va a invertir en la gestión de su territorio 10 millones de euros, lo que supone la mayor inversión de su historia, "unos recursos que se van a destinar a infraestructuras públicas y que van a repercutir de manera muy positiva en el bienestar de todos los vecinos", ha indicado el Ayuntamiento en un comunicado.

Esta iniciativa, que sigue las líneas del Plan Estratégico impulsado por el equipo de gobierno, conformado por el PP y Contigo, se ha reactivado después de que el concejal de Urbanismo, Miguel Gascón, se reuniera la semana pasada con el ingeniero de caminos, Manuel Esquiva, para solventar los problemas de inundaciones del municipio, que "son de primerísima necesidad", ha añadido.

Las obras se centran sobre todo en infraestructuras hidráulicas y espacios y viales públicos afectados por la DANA de 2019, de forma que se va a continuar con el nuevo colector de pluviales, una actuación que se inició en el año 2010 y que ha sido retomada en la actualidad, siendo ejecutada por la Dirección General del Agua de la Generalitat Valenciana.

Así, darán comienzo el próximo martes 19 de abril en la calle Don Pelayo para continuar con el siguiente orden: Plaza de la Libertad, calle Gregorio Martínez, calle Gloria Fuertes, calle Azarbe del Calvario y avenida de Algorfa.

Como la zona de actuación va a afectar a una gran parte del término municipal, incluidas las pedanías, el Ayuntamiento también ha pedido disculpas a los vecinos por las molestias que se puedan ocasionar en el periodo de realización, además de solicitar la colaboración y comprensión de todas las personas afectadas.

Un mes atrás el municipio estaba ultimando una serie de actuaciones en las zonas más afectadas por la DANA, en el centro de la localidad y en los barrios del Saladar, Raiguero, Camino de Catral, la Erica y Moñino, con un presupuesto de 5 millones de euros -la mitad procedente de las arcas municipales mientras que los otros 2,5 millones son de las ayudas por emergencias que el municipio recibió por parte del Ministerio-.

En este caso, las mejoras consisten en el cambio de asfaltado y de saneamiento, así como el reemplazo del alcantarillado original que data de 1970, "totalmente dañado y que estaba ocasionando problemas a la ciudadanía", explicó Gascón. "Son obras muy complejas de realizar por estar en el subsuelo del municipio, pero siguen siendo necesarias y de gran relevancia para la mejora de la calidad de vida de los vecinos de la localidad", añadió el edil.

Así, hasta el momento ya se ha ejecutado un 70% del proyecto y se concluirá en junio, cuando se termine el otro 30% pendiente, que corresponde a toda la red de saneamiento en el Camino de Catral y una nueva toma de agua potable.

Con la DANA resultaron dañadas numerosas infraestructuras hidráulicas, así como el asfaltado, viviendas y edificios públicos, como fue el caso del Centro Cívico de El Saladar. Cuando terminen las actuaciones previstas se habrán realizado 25 kilómetros de nuevas conducciones entre alcantarillado y la red de agua potable en todo el término municipal, además de mejorar la gestión de las aguas residuales, un servicio básico imprescindible para la salud de las personas.

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