Seis operarios y controladores realizan a partir de ahora las tareas de montaje, desmontaje y control de las medidas de seguridad en los mercados de Orihuela. El Ayuntamiento ha puesto en marcha este servicio, con una duración de dos años, a través de una encomienda de gestión a la empresa municipal que integra laboralmente a discapacitados, ILDO, a la que están adscritos estos trabajadores que cuentan también con un técnico de la unidad de apoyo a la actividad profesional para el personal con diversidad funcional.
El concejal de Mercados, Ángel Luis Muñoz Grau, ha avanzado que se van a instalar tres puntos de descanso, que están pensados sobre todo para usuarios mayores y mujeres embarazadas, que dispondrán de una carpa, mesa y al menos cuatro butacas.
Los operarios se encargarán del montaje y desmontaje de circuitos de seguridad siguiendo las instrucciones de la Policía Local y de la Concejalía de Mercados, así como del control de acceso y del suministro, montaje, limpieza y gestión de ocho aseos químicos. También proporcionarán gel desinfectante y también llevarán chalecos identificativos como personal de ayuda, atención e información a los usuarios y mercaderes, a los que apoyarán en la organización de los mercados.
Muñoz Grau ha destacado que otra de las labores que se les ha encomendado es la de poner en conocimiento de los agentes de la autoridad (policía de mercados) infracciones, incidencias o situaciones de alarma que puedan surgir.
Un trabajo, ha subrayado el edil, que se ha demostrado, cuando lo realizaron durante la pandemia, que redujo el número de pequeños hurtos e hizo de estos espacios lugares más seguros.
