El equipo de gobierno del Partido Popular se enfrentará en el pleno ordinario de agosto, el día 25, a un nuevo debate en torno al polémico proyecto de construcción de dos rascacielos junto al parque de Doña Sinforosa. Según la oposición de PSOE, Los Verdes y Sueña, el proyecto asimila la emblemática zona verde, transformándola para dar servicio a los objetivos de la promotora que impulsa las torres. La dirección general de Costas, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica ha cumplido su advertencia previa y ha recurrido ante al Tribunal Superior Valenciano (TSJ) la aprobación del estudio de detalle de los rascacielos del área de reparto 81, que salió adelante con los votos del PP en el último pleno de 2021. Ahora el Ayuntamiento tiene que personarse en el procedimiento para defender ese acuerdo plenario. Y vuelve al pleno porque el órgano competente para determinar la personación en el procedimiento debe ser el mismo que aprobó el proyecto urbanístico.

En la tramitación de los rascacielos, que la empresa promotora resucitó en 2016, Costas ha advertido al Ayuntamiento de que la modificación del Plan General de 2010 impulsada por el alcalde Pedro Hernández que avala la construcción en altura fue validada por la Generalitat sin que Costas la hubiera informado.

El Ayuntamiento alega que se le pidió informe pero nunca respondió. En Doña Sinforosa además Costas señala que entre las parcela en la que se levantarán las torres y la playa hay otra que no considera urbana, la del parque de Doña Sinforosa, por lo que el dominio público marítimo se extiende más allá de la línea litoral y toca a las futuras edificaciones.

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Imágenes del parque de Doña Sinforosa y los planos en los que se contempla eliminar los eucaliptos TONY SEVILLA/INFORMACIÓN

La empresa, que ya ha obtenido licencia municipal para instalar un espectacular stand de promoción también ha pedido licencia de ejecución del proyecto, todavía sin validar por el área de Urbanismo que dirige el alcalde Eduardo Dolón. El recurso de Costas solo tendrá efectos de paralización del proyecto, antes de que se juzgue el fondo del asunto -algo que puede prolongarse años-, si reclama medidas cautelares y el TSJ las acepta. Costas también ha recurrido el proyecto vecino de tres torres de Metrovacesa