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Una bienvenida "insalubre" a La Aparecida

Vecinos de la pedanía oriolana denuncian de vertidos y malos olores cerca de sus viviendas

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Plásticos, basuras, frutas pudriéndose y desechos se acumulan en un terreno en la entrada de la pedanía TONY SEVILLA

Plásticos enganchados en la vegetación, barras de pan desperdigadas, basuras, frutas -sobre todo sandías- y cítricos que pronto se pudren se acumulan en un terreno en la entrada del núcleo poblacional de la pedanía oriolana de La Aparecida, cerca del camino de los Simones. El resultado, según describen vecinos de la zona, es «una atmósfera cargada e insalubre» que empeora con las altas temperaturas hasta el punto de que el viento produce picor en los ojos. Los malos olores, como «a orines», impregnan la ropa tendida en las viviendas cercanas. Así, relatan que un pastor lleva cabras y ovejas a la parcela, por lo que restaurantes y otros negocios trasladan sus desechos sin ningún tipo de control.

Fuentes del Ayuntamiento subrayan que, como cada año en esta época, la administración contrata a unos 80 peones agrícolas para realizar trabajos de desbroce y mantenimiento de caminos, ramblas y solares públicos durante tres meses. En cuanto a los terrenos privados, indican que el Consistorio puede instar al propietario a que lo limpie, aunque es un proceso farragoso en el que se precisa que haya una queja previa.

A todo ello, prosiguen, se añade el hándicap de una orografía complicada en un municipio extenso, con una superficie de 400 kilómetros cuadrados, y numerosos núcleos poblacionales diseminados y en muchos casos rurales, como es el caso de La Aparecida.

Las mismas fuentes señalan que el concejal de Infraestructuras, Ángel Noguera, también alcalde pedáneo de La Aparecida, realiza una labor sobre el terreno, dando respuesta a los escritos y reclamaciones vecinales. Por ejemplo, en estos días ha atendido a los residentes del barrio de Los Infiernos, en Arneva. «Donde nos llaman, vamos y actuamos», agregan. En este sentido, señalan que los vecinos deben presentar su queja en el registro general del Ayuntamiento para que se curse en el área competente -en este caso Sanidad o Medio Ambiente- para comprobar si la explotación ganadera cumple con los requisitos que se les exige a las instalaciones agropecuarias. No obstante, los mismos vecinos que advierten de la situación que padecen sostienen que llevan meses denunciando y reclamando una solución.

Por último, fuentes del Ayuntamiento hacen hincapié en que al igual que se ha conseguido concienciar a la población del peligro que acarrean las quemas agrícolas, prohibiéndolas en toda la Comunidad desde el 15 de julio al 15 de octubre, el siguiente paso es lograr lo mismo el cuidado de terrenos tanto públicos como privados y en los vertidos ilegales de residuos y basuras. Recientemente, este diario también puso de relieve un vertedero ilegal junto al único cementerio del municipio.

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