La II edición de los Premios del Agua Lorenzo Pardo, que se ha celebrado en el Teatro Cortés de Almoradí, ha acogido una mesa de debate bajo el título «Aguas regeneradas y vertido cero», que ha analizado la situación actual y los retos de futuro para aprovechar al máximo los recursos hídricos en un contexto de escasez y recortes del trasvase Tajo-Segura, y sobre todo con la vista puesta en que todas las aguas tratadas se inyecten en el sistema. Previamente, se ha proyectado un vídeo elaborado por Mariló Berenguer y Nati Calleja, responsables del taller de imagen de la Universidad de Alicante, dedicado precisamente a este asunto.  

"El porcentaje de reutilización de un 85% en la cuenca del Segura es un éxito del Levante"

José Carlos González Martínez - Jefe del área de calidad de las aguas de la CHS

José Carlos González Martínez, jefe del Área de Calidad de las Aguas de la CHS, ha cifrado el porcentaje de reutilización en un 85% en la cuenca del Segura, lo que ha definido como «un éxito del Levante». Además, ha subrayado que frente a la incertidumbre», la reutilización es una garantía porque una ciudad no va a dejar de producir aguas residuales que luego se depuran y finalmente se usan en los regadíos. 

"Hay margen de mejora; en la Comunidad Valenciana se vierten al mar 500 hectómetros cúbicos"

José Vicente Andreu - Presidente de Asaja Alicante

En la misma línea, José Vicente Andreu, presidente de la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja), ha puesto en valor que «la Vega Baja es líder a nivel nacional». Sin embargo, esa tasa disminuye en Alicante y en el norte de la provincia. Además, ha hecho hincapié en que «en la Comunidad Valenciana se vierten al mar 500 hectómetros cúbicos». De esta forma, ha concluido que «hay un margen importante de mejora» que es necesario explotar «por el déficit que tenemos y el recorte del trasvase». Por ello, ha abogado por que la CHS intente que lleguen esos recursos de Alicante -con un trasvase entre las cuencas del Júcar y el Segura- e incluso desde la Comunidad. Es decir, «el agua como eje vertebrador de la Comunidad», ha explicado.

José Manuel Carrillo Cañizares, delegado del Colegio Ingenieros Agrónomos de Levante, ha señalado que es necesario realizar «un mayor esfuerzo inversor en aprovechar la que se vierte al mar». Por ejemplo, «en Pinedo se están tirando más de 100 hectómetros cúbicos al mar», por lo que abogó por que las confederaciones hidrográficas reordenen esos recursos.

"Deben conectarse las zonas de producción con las de consumo y disminuir las que van al mar"

José Manuel Carrillo Cañizares - Delegado del Colegio de Ingenieros Agrónomos de Levante

En cuanto a la Vega Baja, Andreu ha añadido que hay que seguir mejorando, sobre todo cuando hay temporales -las depuradoras se saturan y disminuye la calidad que llega a los regantes-, así como en la recogida separada de aguas pluviales

Juan Luis Martínez Muro, director técnico de Proaguas, ha resaltado que es competencia de los ayuntamientos el control de los vertidos en alcantarillados y las infiltraciones. Con todo, ha destacado que «la provincia dispone de tratamientos terciarios avanzados que logran una buena calidad en las aguas depuradas». A los altos costes en tratamiento ha sumado los de transporte, ya que las grandes poblaciones de la costa son las que generan mayor volumen de aguas residuales -es decir, susceptibles de ser reutilizadas-, pero el gran consumidor es la agricultura, a menudo lejos de esos puntos.

"La provincia dispone de tratamientos avanzados que logran una buena calidad en depuración"

Juan Luis Martínez Muro - Director técnico de Proaguas

El 50% de las aguas reutilizadas en la cuenca del Segura procede de la costa, principalmente de Torrevieja, el litoral oriolano y Guardamar. Andreu ha subrayado la buena calidad: «Los cítricos que se riegan con agua de la depuradora de Torrevieja son los mejores de la comarca». Carrillo Cañizares, ha insistido en invertir en infraestructuras que conecten las zonas de producción con los lugares donde se gasta.  

Martínez Muro también ha apuntado «una necesidad de almacenar en torno a un 35% del volumen reutilizado», mientras que González Martínez ha resaltado que un reglamento europeo, de directa aplicación a partir del próximo junio, establecerá estándares de calidad más rigurosos que los actuales, lo que aumentará los costes en analíticas y tratamiento.