Fue el 25 de noviembre de 2008 cuando abrió sus puertas el Museo Didáctico e Interactivo de Ciencias de la Vega Baja del Segura de la Comunidad Valenciana (Mudic), un nombre reconocido ya en toda la comarca al que en su 14 aniversario se le va a agregar el de Jesús Carnicer, en honor a su fundador -fallecido-, el profesor de Física y Química del IES Tháder de Orihuela. Así se reinaugurará este sábado en un acto que comenzará a las 10.30 horas con una visita guiada, la representación de la obra de teatro «Erisictón» -a cargo de la escuela de teatro Mudic- y visionado de los cortos «Eco-girls» -realizados por la escuela de cine Mudic-.  

Porque este centro, situado en la Escuela Politécnica Superior de Orihuela, en el campus de Desamparados de la UMH, ha ampliado en todo este tiempo su oferta, sumando la cultura al germen de su creación: aprender ciencias de una forma divertida. En palabras de su directora, Mari Carmen Perea, profesora de Matemáticas de la UMH, tiene «una vocación social»; es decir, que «todo el mundo tenga acceso a la cultura científica», independientemente de dónde se viva o del poder adquisitivo. Así, el Mudic realiza actividades en los centros educativos y en las plazas de los municipios de la comarca. «Acercamos la ciencia», añade, ya que para visitar otro museo similar habría que desplazarse al Príncipe Felipe en Valencia.

Tener una estructura permanente de divulgación científica para la comarca fue el objetivo que se marcó un grupo de docentes de la Asociación de Profesores de Ciencias «Hypatia de Alejandría», que gestiona las instalaciones, mientras que la titularidad es municipal (el Ayuntamiento destina 60.000 euros anuales), y la Universidad cede las instalaciones y se encarga del mantenimiento.

Lo que se inició con solo dos salas y un aula taller cuenta ahora con tres salas con más de 60 módulos y 30 talleres. No se exponen objetos, sino procesos y fenómenos científicos que convierten las salas en experiencias, como un hormiguero que enseña el ciclo de vida, un billar para explicar las propiedades de la elipse, un cañón de etanol para mostrar la reacción química, un scalextric en el que los coches se mueven a base de pedalear en bici o una cámara oscura que reproduce cómo se genera la imagen en el ojo. A ello se suman los talleres y experimentos, que los diseñan profesores en base al currículo escolar y las tendencias educativas.  

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Un paseo botánico por el Museo de Ciencias en Orihuela para conocer más de 60 especies Tony Sevilla

Las instalaciones también cuentan con una emisora de radio, un jardín científico con relojes de sol, un planetario dedicado a Henrietta Swan Leavitt y un huerto -en honor a Norman Bourlaug-, en el que se realizan talleres de siembra, cosecha y cultivos de temporada, así como un paseo botánico que muestra plantas autóctonas, exóticas e invasoras y los usos medicinales y gastronómicos. Para continuar con esa semilla que germinó hace 14 años con una inauguración a cargo del Premio Nobel de Física George Smoot.