Cambiemos Orihuela ha vuelto a solicitar la reducción de precios de la zona azul: "Venimos años insistiendo en que hay que regular el aparcamiento, especialmente en zonas de alta densidad comercial, pero una cosa es regular y otra mercantilizar sin control para fomentar el negocio privado, como hicieron PP y Ciudadanos", ha señalado el concejal Javier Gracia.

El grupo municipalista ha recordado que "durante estos años no era un servicio para Orihuela, sino un negocio para la concesionaria"; sin embargo, ahora que su gestión es pública desde principios de año "debemos introducir cambios drásticos que beneficien a vecinas, vecinos y trabajadores del servicio", ha agregado.

Los parquímetros estuvieron inoperativos desde enero, después de que caducara el contrato con la adjudicataria sin que se hubiera preparado una nueva licitación. Y así hasta junio, cuando se reactivó el servicio tras la aprobación por parte del pleno de encargar una encomienda de gestión a la empresa municipal ILDO.

En ese sentido, Cambiemos ya trasladó al consejo de administración de ILDO que se introdujera una rebaja en el precio, al mismo tiempo que ha propuesto que no se cobre en julio y agosto al haber más aparcamientos libres en esas fechas.

A tenor del informe de costes que sirvió para respaldar la gestión a través de ILDO, así como la cifra de ingresos estimada, Gracia ha indicado que "hay margen para aplicar una bajada de precios", además de "una reducción de plazas en zonas de baja densidad comercial".

Número de plazas

En este sentido, ha insistido en "revertir la ampliación irregular [de plazas] que aprobaron PP y Ciudadanos", recordando que en agosto de 2020 las concejalías de Infraestructuras y la de Contratación, entonces en manos de la formación naranja y del grupo popular respectivamente, llevaron a cabo una ampliación "ridícula en su argumentación e innecesaria en sus efectos", ha señalado Gracia, que ha explicado que como consecuencia de la ampliación de las terrazas de hostelería a causa de la pandemia la adjudicataria solicitó aumentar el número de plazas en otros lugares para "mantener el volumen de negocio".

A juicio de Gracia, el concejal de Infraestructuras, Ángel Noguera, hizo suya la propuesta, un modus operandi de Ciudadanos que Cambiemos describe como "una escuela de negocios". Así, según Carlos Bernabé, edil de Cambiemos, "es evidente que Noguera considera que el negocio de algunas empresas está por encima del interés público, por eso gestiona la contratación pública que afecta a sus áreas con el único objetivo de que algunas empresas ganen mucha pasta y no para dotar de servicios al municipio".

Es el Ayuntamiento, y no la adjudicataria, el que tiene la autoridad para decidir dónde crear esta figura, por lo que "aquella ampliación fue absurda e innecesaria y debe revertirse o, cuando menos, revisarse", ha añadido Bernabé, que ha concluido que "la zona azul debe estar gestionada no con criterios mercantiles, sino de eficacia en términos de movilidad sostenible para la población".