El Juzgado de Instrucción número 3 de Orihuela ha archivado la denuncia por la vía penal que interpuso el PP por supuesta administración desleal contra Luis Ruiz, gerente de Orihuela Cultural, la empresa municipal que con un presupuesto anual de 950.000 euros gestiona la actividad cultural, los museos de la ciudad y 16 dependencias culturales.

El auto dispone que "se acuerda el archivo por no existir elementos suficientes para la actuación del derecho penal sobre los hechos objeto de denuncia". Asimismo, daba un plazo de cinco días para presentar un recurso de apelación, sin que se haya producido.

Esta denuncia se produjo a raíz del cierre de los museos durante el puente de la Semana Santa, lo que, según la denuncia que presentó el concejal popular Rafael Almagro, causó "un grave perjuicio patrimonial tanto para la imagen de la ciudad como para las arcas municipales y para los comercios al no poder ofrecer a sus visitantes y turistas el atractivo de sus museos".

Ahora, una vez que se ha archivado la causa, Ruiz responsabiliza directamente a Almagro de estos hechos. Tal y como justificó en su día, el gerente insiste en que esta decisión estuvo motivada por un informe de una auditoría externa, que señalaba que la sociedad había incurrido en pérdidas, lo que suponía una causa de disolución según lo que marca la normativa, lo que obliga a no generar gastos que puedan resultar inasumibles para la entidad en ese momento, en tanto no se procediera a recuperar su equilibrio financiero y patrimonial.

Así, Ruiz afirma que siempre manifestó que la apertura en esos festivos resultaba imposible al no poder contratar personal sustituto sin vulnerar la ley, por la delicada situación contable, que atribuye a un incumplimiento por parte del Ayuntamiento de cubrir la totalidad de las transferencias a favor de la sociedad a través del presupuesto de la Concejalía de Turismo durante dos años, habiendo realizado sus transferencias correctamente el departamento de Cultura.

La primera estaba gestionada por el PP, mientras que en la segunda estaba al frente Ciudadanos, que fue quien propuso a Ruiz como gerente. En el momento de la denuncia, los populares estaban gobernando en solitario y habían asumido las competencias que ostentaba la formación naranja a raíz de presentar la moción de censura con el PSOE, que finalmente salió adelante el 25 de abril. Entretanto, también cesaron a Ruiz, que luego fue nombrado de nuevo.

A su juicio, la denuncia vino motivada por la moción de censura: "Fue una pataleta con el único afán de destruir". En este sentido, recuerda que sus funciones como gerente de la sociedad municipal nada tienen que ver con temas partidistas. "Me dedico a la gestión, e intentaron desprestigiarme", explica, al mismo tiempo que señala que está estudiando acciones legales contra Almagro y el exalcalde Emilio Bascuñana por dañar su imagen acusándolo de administración desleal.

"Fue una persecución política", insiste, a la vez que se muestra satisfecho de que se demuestre que actuó correctamente y conforme a la ley, negándose a "las presiones" y "exigencias" de Almagro y Bascuñana para que abriera los museos a sabiendas de que de hacerlo se procedía de manera irregular, según relata Ruiz.

La denuncia que interpuso el PP ante los juzgados explicaba que "por acuerdo de la propia sociedad e instrucción expresa del Ayuntamiento, único socio de Orihuela Cultural, los museos de la ciudad deben abrir en los días festivos" a tenor del calendario laboral aprobado.

En este sentido, agregaba que Orihuela Cultural está obligada a cumplir con las "instrucciones fijadas unilateralmente" por el Ayuntamiento y a realizar los trabajos que este le encargue en función de la encomienda de gestión formulada.

Sin embargo, decretó el cierre "de forma unilateral y sin autorización ni consentimiento del consejo de administración, ni del concejal de Cultura [en ese momento Almagro desde la renuncia de los ediles de Ciudadanos al presentar la moción de censura], ni del alcalde, excediéndose de las funciones que le corresponden según los estatutos", indicaba la denuncia.