El exalcalde de Benejúzar niega en el juicio el reparto irregular de propaganda electoral en 2015

La sección VII de la Audiencia Provincial, con sede en Elche, comenzó hoy el juicio contra el candidato del PSOE a la Alcaldía de Benejúzar, Miguel López, y otros compañeros de partido que fueron procesados a petición de la Fiscalía Anticorrupción, representada por el fiscal Pablo Romero, y de la acusación popular, personificada por el PP y por el letrado Emilio Fernández, por supuestamente repartir propaganda electoral pidiendo el voto días antes de comenzar el periodo hábil para ello de cara a las municipales de 2015.

Se da la circunstancia de que el candidato socialista es uno de los tres del PSOE que ha concurrido a las municipales en la Vega Baja este pasado 28M pendientes de procesos judiciales pues también son los casos de los regidores de Los Montesinos y de Benferri, José Manuel Butrón y Luis Vicente Mateo, respectivamente. El primero de ellos está pendiente de apertura judicial por supuesto acoso a un técnico y el segundo condenado por acoso laboral al secretario. 

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Procesados

Miguel López y el resto de procesados se enfrentan a una petición de tres años de inhabilitación para ocupar cargo público y de una pena multa de 15 meses a razón de diez euros al día. Las defensas de los acusados solicitan en sus escritos la absolución con base a que no ha quedado probado que sus clientes participaran en el reparto de publicidad nocturno que acabó con el municipio de 5.400 vecinos buzoneado por completo y con pasquines en los parabrisas de los vehículos -incluidos los patrulla de la Policía Local- pidiendo el voto para Miguel López, entonces secretario comarcal y local del PSPV-PSOE, quien por primera vez era el candidato de la formación. El PP detectó esta práctica y lo notificó a la junta electoral que a su vez dedujo testimonio de los hechos para su investigación por la vía penal.

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Cargo público

La decisión que se adopte en el juicio es clave para el futuro político de Miguel López porque para el caso de que sea condenado e independientemente de que presente un recurso tendrá la obligación de dejar el cargo público (inhabilitación para el sufragio pasivo), algo con lo que el propio López discrepa, según explico al diario, al entender que no le afectaría una resolución en contra en sus expectativas políticas. López explico al diario que una condena no le separa de la vida pública porque se refiere a la elección los próximos tres años, no ahora.

Se da la circunstancia de que aún se desconoce quién gobernará Benejúzar porque el PP fue la fuerza más votada por delante de PSOE y Ciudadanos, pero estos dos partidos, para el caso de pactar, como hicieron entre 2019 y 2023 sumarían votos para mantener la Alcaldía que en el mandato que ahora termina se repartieron el propio Miguel López y Rosa García a razón de dos años cada uno. Una circunstancia similar ocurrió en San Fulgencio en 2018 costándole la Alcaldía a Carlos Ramírez tras ser condenado y pese que se resistió a dejar el cargo hasta que se resolviera su recurso.

Apertura del periodo electoral

En su declaración de ayer, Miguel López admitió haber visto dos días antes de la apertura del periodo electoral en un acto en el partido aquellos pasquines que acabarían horas más tardes empapelando la ciudad. Los recordaba en una caja y cerrados. En su declaración negó ser quien los repartió o haber dando órdenes para ello. Lo cierto y verdad es que nadie en la vista, entre los acusados, admitió haber participado en aquella actividad propagandística pidiendo el voto que se adelantó en dos días al inicio de la campaña. 

La prueba testifical, en la que participó Antonio Bernabé, alcalde de Benejúzar entre 2011 y 2019 y aspirante en este 2023 a recuperar el sillón, es clave para la acusación a la hora de establecer las responsabilidades sobre quienes participaron en el reparto. El juicio se suspendió a falta de un testigo y se fijó una nueva fecha para el 21 de junio, dentro de dos semanas cuando, es posible, Miguel López se pueda sentar en el banquillo bien como nuevo alcalde o bien como jefe de la oposición.

La vista tenía que haberse celebrado el pasado año, lo que hubiera evitado la circunstancia de coincidir con el actual periodo electoral, pero se suspendió fijándose para este pasado miércoles.