A partir del mes de noviembre, Estados Unidos abrirá su puerta a los turistas británicos y europeos, eso sí, siempre que cumplan unas condiciones muy estrictas que permitirán al sector respirar aliviados después de que los viajes de ocio hayan estado en el último año y medio totalmente paralizados en el país norteamericano.

El Gobierno de Joe Biden anunció hace pocos días que desde ese mes se permitirá la entrada de viajeros del Reino Unido y la Unión Europea que estén vacunados con la pauta completa.

Algunas de las novedades en la normativa estadounidense en esta materia son:

  • Pauta completa de vacunación contra la Covid-19 y prueba diagnóstica de la enfermedad antes de coger el vuelo con destino a Estados Unidos; otro test negativo antes de salir del país de regreso a España.
  • Los ciudadanos estadounidenses que regresen a su país deberán hacerse el test y que sea negativo; si no están completamente vacunados, deben hacerse una prueba justo antes de salir hacia Estados Unidos, y otra al bajar del avión. Y si están con la pauta completa, no harán cuarentena alguna.
  • Se emitirá una orden para rastrear contactos por parte de las compañías aéreas para evitar brotes en los viajes: se pedirá teléfono, correo electrónico y hotel.