Cuando procedes a realizar las tareas de limpieza de tu hogar hay muchas zonas o elementos de tu casa que no limpias a diario. Por ejemplo, todos los días o semanas no lavas las fundas de los sofás o no descuelgas las cortinas para meterlas en la lavadora, pues lo mismo te pasará si tienes estores.

Se trata de un elemento muy común en nuestras casas y que no limpiamos todo lo que deberíamos. En este caso te hablamos de estores enrollables. La mayoría de esta especie de cortinas están fabricados con un material que repele el polvo, pero lo cierto es que es totalmente necesario limpiarlos periódicamente.

Cómo limpiar un estor fácilmente

La ventaja de limpiar un estor es que es muy sencillo. Si tienes un estor que puedes desmontar fácilmente te recomendamos que lo hagas para obtener unos mejores resultados de limpieza y porque, básicamente, te resultará más fácil.

Si este es tu caso, debes quitar el estor de su encaje y desplegarlo sobre una superficie lisa. Como necesitarás bastante tamaño puede que necesites hacerlo directamente sobre el suelo. Por ello, asegúrate de que esté bien limpio antes de extenderlo. 

Una vez que hayas realizado este paso debes preparar una esponja húmeda. Muy importante, húmeda, no mojada, ya que el exceso de líquido puede perjudicar la tela de tu estor. Con la esponja vete frotando suavemente la tela y haz un poco más de hincapié si tienes alguna mancha rebelde. Si hay alguna mancha que no “sale” sólo con agua, puedes usar algún producto específico a base de jabón neutro, pero primero asegúrate bien de que es compatible con ese tipo de tela y pruébalo primero en una zona pequeña y que no sea visible.

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A continuación con una bayeta también humedecida (no mojada) procederemos a limpiar el estor nuevamente. Tendrás que repetir este proceso por las dos partes del estor. Te recomendamos dejarlo secar totalmente extendido un par de horas. Puedes colgarlo si es que tienes espacio suficiente para que quede totalmente extendido. Si lo enrollas antes de que esté completamente seco corres el riesgo de que la tela se estropee.

Si en tu caso no puedes descolgar el estor o prefieres limpiarlo sin descolgarlo, el proceso es muy sencillo. Desarrolla el estor completamente y comienza por la parte trasera, la que queda más pegada al cristal. Es muy importante que limpies de arriba hacia abajo para ir arrastrando la suciedad y el polvo. A continuación sigue con la parte de delante y deja que se seque todo bien.