El Aloe vera, también llamado sábila, áloe de Barbados o acíbar es una planta muy reconocida por sus propiedades medicinales y curativas y que también puede cultivarse en casa. Dentro de sus hojas contiene un gel muy preciado para tratar quemaduras y que también se utiliza para fabricar cosméticos. Por esta razón, cultivar una planta de aloe vera en casa tendrá un doble sentido. Por un lado tendrás una bonita planta decorativa y al mismo tiempo tendrás listo el gel de aloe vera puro por si fuera necesario para tratar alguna quemadura o roce de la piel. Vamos a contarte cómo cultivar tu propia planta de aloe vera en casa.

¿Cómo cuidar un Aloe vera en maceta?

Cultivar una planta de Aloe Vera en casa es muy sencillo aunque no seas un experto jardinero. Solo tienes que tener en cuenta algunos detalles par que tu planta de Aloe vera crezca sana y lustrosa.

Luz

El Aloe vera es un cactus y como todos los de tu familia adora el sol. Por esta razón, debes colocarlo en cualquier rincón de la casa que esté bien iluminado como cerca de las ventanas o en la terraza o balcón.

Maceta grande

El Aloe vera crece rápidamente por lo que tendrás que cambiarlo de tiesto cada año para que las raíces puedan seguir desarrollándose con normalidad.

Agua

El Aloe vera necesita muy poca agua, es más puede sobrevivir bastante tiempo sin ser regada. Así que con regarla cada 15 días es suficiente. Si es posible utiliza agua de lluvia y que no esté muy fría.

Temperatura ideal

Al aloe vera no le gusta mucho el frío por lo que si la tienes en a terraza en invierno quizá sea conveniente meterla en el interior de casa.

Abono

Si quieres que tu planta de Aloe vera crezca fuerte y sana debes abonarla dos veces al año.

¿Dónde poner el Aloe vera en casa?

El Aloe vera puede colocarse en cualquier lugar del hogar, incluso en los dormitorios

El Aloe vera contiene un gel muy útil para tratarlas quemaduras. Pixabay

Los beneficios de tener una planta de Aloe vera en casa

Como hemos dicho anteriormente, cultivar una planta de Aloe vera en casa tiene muchos beneficios más allá del meramente decorativo. Por un lado es un potente purificador de aire que absorbe las sustancias nocivas de nuestro hogar y es adecuado para cualquier estancia. Además, el gel que contienen sus hojas puede ayudarte en caso des sufrir alguna quemadura leve. Corta una hoja y pon directamente el gel sobre la piel dañada. Notarás un alivio inmediato.

Además de sus beneficios como purificador natural del aire y como gel para las quemaduras, también es innegable su carácter decorativo.