Se trata de una de las flores más bonitas y elegantes que existen. No en vano, es una de las preferidas de las novias para hacer sus ramos. Estamos hablando de la Cala Blanca una flor esbelta que puede alcanzar hasta un metro de altura. También es conocida con otros nombres como el lirio de agua o el aro de Etiopía. A pesar de su apariencia delicada y frágil es una planta bastante resistente e ideal para cultivar en casa. Vamos a contarte cómo puedes plantarla en una maceta y los cuidados necesarios para que luzca siempre perfecta en cualquier rincón de tu hogar.

Cómo plantar una Cala Blanca en casa

La forma más fácil de plantar en casa una Cala Blanca es a través de bulbos. Pon unos cuantos juntos dejando una separación de unos 15 centímetros y así cuando florezcan tendrás un auténtico ramo natural. Elige una maceta grande y con un buen drenaje y pon en el fondo de la misma una capa de arcilla para facilitar la eliminación del agua sobrante.

Después coloca los bulbos y pon encima otra capa de sustrato fertilizado con un abono orgánico. Ponle agua pero no demasiada ya que esta planta necesita humedad constante pero no es bueno encharcar sus raíces. Coloca la maceta en un lugar bien iluminado de la casa y prepárate para disfrutar en breve de sus bonitas flores.

La flor de la cala blanca es muy elegante Pixabay

¿Cómo cuidar la planta de Cala Blanca?

A la hora de cuidar la Cala Blanca debes tener en cuenta ciertos aspectos como la cantidad de agua necesaria o si debes podarla o no. Vamos a detallarte todo lo necesario para que la Cala crezca sin problemas.

El mejor lugar de casa para colocar la planta

La Cala necesita luz indirecta para crecer así que debes colocarla en un lugar de la casa donde esté en semisombra. Si quieres durante unas horas puedes colocarla en un lugar más soleado pero con cuidado de que no reciba los rayos del sol directamente, ya que podrían dañar las flores.

La cala blanca necesita mucha humedad Pixabay

Así debes regar la Cala Blanca

Esta planta necesita mucha humedad para sobrevivir. Debes regarla con frecuencia, sobre todo durante la época de floración. La forma más fácil de saber cuándo debes regarla es observar el sustrato y ponerle agua antes de que llegue a estar seco. Puedes colocar un plato bajo la maceta para mantener la humedad.

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Las plagas que pueden atacar a esta flor

Debes observar detenidamente esta flor ya que puede ser atacada por diferentes plagas como la cochinilla o la araña roja. Si ves manchas en sus hojas puede que haya sido atacada por la cochinilla por lo que deberás ponerle un tratamiento para acabar con ellas. En el caso de que las hojas se pongan amarillas puede que la planta esté siendo atacada por la araña roja. Una buena forma de evitarlo es pulverizar con agua las hojas para que siempre estén húmedas.