En otros artículos de nuestra sección de Decoración te hemos hablado de otros trucos para limpiar tu plancha, incluso si la base está quemada. Muchas veces cuando vamos a planchar nos damos cuenta de que tenemos la base de este electrodoméstico negra porque se nos ha quemado con alguna prenda. 

Debemos tener muy en cuenta este problema, ya que si no le ponemos remedio podemos llegar a estropear nuestras prendas manchándolas de negro o incluso provocando algún agujero no deseado. 

Cómo limpiar la plancha de vapor

¿Qué hacemos? Pues si tienes una plancha de vapor tenemos el truco definitivo para eliminar los restos quemados: usar una vela. Eso sí, elige una que no tenga olor ni un color muy llamativo para no correr el riesgo de que se impregne alguna prenda.

Este sencillo artículo que (casi) todos tenemos en casa nos puede ayudar a acabar con la suciedad acumulada en la base de una plancha de vapor. Lo primero que tienes que hacer es quitar la función vapor y ponerla al mínimo de temperatura.

Cuando esté un poco caliente será el momento de frotar la base con la vela. A continuación deberás frotar con mucho cuidado con un estropajo de acero inoxidable para no rayarla. Verás como los orificios de la plancha han quedado tapados con la cera de la vela. Coge un trapo viejo, que no te sirva, y activa la función de vapor. Coloca la base sobre el trapo y presiona la función vapor. La cera saldrá de los agujeros y además saldrá mucha de la suciedad acumulada.

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Si quieres asegurarte de que se ha eliminado tanto la suciedad como la vela te recomendamos que planches alguna prenda vieja y así comprobarás que no se daña.

Otro elemento que tienes que tener muy en cuenta a la hora de limpiar tu plancha de vapor es el depósito. En él se acumulan restos de agua y de cal que también pueden dañar tu plancha o tu ropa. Para acabar con esta suciedad puedes mezclar agua con vinagre blanco a partes iguales y llenar el depósito con ella. A continuación calienta la plancha y activa la función vapor. En el mismo trapo viejo prueba a ir planchando para que el agua vaya pasando por todas las partes de la plancha. Para asegurarte de que no quedan restos de vinagre cuando hayas acabado puedes repetir el proceso usando únicamente agua destilada.