Si tienes la desgracia de tener moho en casa, tienes un problema. Y si lo tienes en tu colchón más todavía ya que te podemos asegurar de que es la manifestación visible de una soberana colonización de hongos de tamaño microscópico.

Esto quiere decir que cuando lo vemos es porque la invasión fúngica ya está muy avanzada. Y aunque lo quitemos de la superficie del colchón, no tengamos la menor duda de que el interior del mismo también está repleto de estos microorganismos.

Aunque no los veamos, los hongos siguen estando ahí: la prueba es que el olor a moho no desaparece cuando eliminamos su capa superficial, por mucho que limpiemos o perfumemos el colchón.

Añadimos que los mohos suponen un riesgo para la salud, pudiendo causar serias infecciones respiratorias y dermatológicas.

Cómo acabar con el moho

Una solución pasa por utilizar un químico antifúngico profesional. Esto no puede hacerse en un colchón, ya que los restos del producto permanecerían en él y son altamente perjudiciales para la salud. La lejía es una alternativa doméstica barata y muy eficaz, ampliamente utilizada en los hogares para eliminar los mohos de paredes, techos y rincones de bañeras y duchas.

¿Es posible deshacerse definitivamente del moho en un colchón?

La respuesta es que no. El procedimiento más eficaz para eliminar todo el moho y sus esporas en un colchón, sin riesgos para la salud, sería empaparlo por completo en agua con una muy alta concentración de lejía y dejarlo secar.

Tras el proceso, habría que poner a ventilar el colchón durante varios días para que quedase totalmente libre de los cloros que contiene la lejía.

Pero a nadie se le escapa que la lejía arruinaría los tejidos exteriores del colchón. Además, la lejía puede afectar al núcleo de espuma viscoelástica o látex del colchón. Y si el núcleo es de muelles ensacados, atacar a los materiales de los que están compuestos los muelles.

El alcohol etílico tampoco sirve

Una alternativa menos agresiva sería empapar el colchón enmohecido en alcohol de farmacia, pero esta sustancia no acaba con todas las cepas de mohos, por lo que no tendríamos una garantía de eliminación total.

Por lo tanto, si el moho ha invadido un colchón, lo más aconsejable es tirarlo y adquirir uno que incorpore de fábrica un tratamiento antifúngico.