Halloween está a la vuelta de la esquina y todos los escaparates y tiendas de la ciudad ya lucen su decoración a base de fantasmas, brujas y calabazas. Si tu también quieres darle a tu casa un toque diferente para la festividad de Todos los Santos pero no quieres caer en los típicos artículos decorativos te vamos a dar una ideal genial. Decorar tu casa con plantas de interior para esta fecha.
Pero no con unas plantas cualquiera. Hemos encontrado una flor perfecta para este día. Se trata de la planta murciélago (Tacca chantrieri). Es de un color muy oscuro, casi negro, y muy original, por lo que causará sensación en cualquier lugar de la casa. Vamos a ver cómo debes cuidarla y algunos consejos para que te dure mucho más allá de Halloween. Se trata de una planta delicada, así que tendrás que dedicarle algunos minutos cada día pero el resultado merecerá la pena.
Así es la planta murciélago
La planta murciélago es originaria de India y recibe su nombre por sus peculiares flores de un color muy oscuro y unos curiosos "bigotes" que cuelgan de ella y que recuerdan a las alas de estos animales.
Estas peculiares flores nacen de largos tallos y sobresalen entre las frondosas hojas verdes de la planta.
Es un vegetal bastante sensible a los cambios de temperatura. Se desarrolla mejor en ambientes cálidos por lo que es ideal para tenerla dentro de casa. En verano puedes sacarla al balcón o a la terraza siempre que encuentres un sitio resguardado para colocarla.
Cuidados que necesita la planta murciélago
Como ya hemos adelantado, se trata de una planta delicada, por lo que es esencial que la cuides con mimo si quieres que te dure más allá de la noche de Halloween.
En primer lugar debes tener controlado el sustrato en el que vas a plantarla, que debe ser muy rico en nutrientes. Además, es conveniente que le añadas un buen fertilizante líquido cada mes ya que este abono le dará la fuerza necesaria para desarrollarse correctamente. También necesita un ambiente húmedo, por lo que te aconsejamos que pulverices sobre sus hojas agua.
Cuando observes que el tiesto se le queda pequeño debes cambiarla a una maceta más grande pero con cuidado de no dañar sus raíces en la mudanza.
