Ni lejía ni bicarbonato: esto es lo mejor para dejar las zapatillas de lona blancas

Este truco te ayudará a cuidar las converse y a recuperar la blancura del primer día

Ni lejía ni bicarbonato: esto es lo mejor para dejar las zapatillas de lona blancas.

Ni lejía ni bicarbonato: esto es lo mejor para dejar las zapatillas de lona blancas. / pixabay

Mati Sirvent

Mati Sirvent

Mantener las zapatillas de lona en perfecto estado puede ser un desafío, especialmente si son de color blanco. Con el uso cotidiano, estas zapatillas tienden a ensuciarse rápidamente, y muchas veces recurrimos a productos fuertes como la lejía o al confiable bicarbonato de sodio para restaurar su color original. Sin embargo, existe un truco sorprendente que puedes encontrar en tu cocina y que es igual de eficaz para devolverle la blancura a tus zapatillas de lona: el vinagre blanco. Este ingrediente no solo es económico y fácil de conseguir, sino que también es respetuoso con el medio ambiente y menos agresivo para los materiales de tus zapatillas.

El vinagre blanco ha sido utilizado durante siglos en la limpieza del hogar gracias a sus propiedades antibacterianas y su capacidad para descomponer la suciedad y las manchas. Es un producto natural, no tóxico, lo que lo convierte en una alternativa mucho más segura en comparación con la lejía o el bicarbonato, que pueden ser más abrasivos para las telas delicadas. Además, el vinagre es suave con las manos y no requiere ventilación especial cuando lo utilizas en interiores, a diferencia de otros productos químicos.

Cómo limpiar las zapatillas blancas de tela.

Cómo limpiar las zapatillas blancas de tela. / PIXABAY

El vinagre actúa como un agente blanqueador y desodorizante que, combinado con otros ingredientes naturales, puede devolverles a tus zapatillas ese blanco radiante que parece perdido.

Cómo limpiar las zapatillas de lona con vinagre blanco

El proceso para limpiar tus zapatillas de lona con vinagre blanco es bastante sencillo y requiere muy pocos materiales, la mayoría de los cuales ya tienes en tu cocina. Sigue estos pasos para obtener los mejores resultados:

  1. Materiales necesarios: Necesitarás vinagre blanco, agua tibia, un cepillo de cerdas suaves (puede ser un cepillo de dientes viejo), jabón neutro y un paño limpio.
  2. Preparar la solución limpiadora: Mezcla en un recipiente una parte de vinagre blanco con dos partes de agua tibia. Si las zapatillas tienen manchas más profundas, puedes añadir una pequeña cantidad de jabón neutro a la mezcla para potenciar el poder limpiador.
  3. Cepillar las zapatillas: Antes de aplicar la solución, cepilla suavemente las zapatillas para eliminar el polvo y la suciedad superficial. Esto facilitará que el vinagre penetre en las manchas.
  4. Aplicar la solución: Con el cepillo de cerdas suaves o un paño, aplica la solución de vinagre y agua sobre las zonas manchadas de las zapatillas. Frota suavemente en movimientos circulares, prestando especial atención a las manchas más difíciles.
  5. Aclarar y secar: Una vez que hayas limpiado todas las áreas, aclara las zapatillas con agua fría para eliminar los restos de vinagre. Luego, seca las zapatillas con un paño limpio o déjalas al aire libre para que se sequen por completo. Es importante que evites la luz solar directa, ya que puede amarillear las lonas.

Ventajas de no usar lejía ni bicarbonato

La lejía es, sin duda, un potente agente blanqueador, pero su uso continuo puede debilitar las fibras de la lona, lo que provoca que las zapatillas se desgasten más rápido y que incluso pierdan su forma original. Además, la lejía puede dejar manchas amarillentas si no se enjuaga bien, lo que va en contra del objetivo de blanquear las zapatillas.

El bicarbonato, aunque es menos agresivo, puede no ser tan efectivo en las manchas más difíciles o en áreas más grandes de las zapatillas. Además, el residuo que deja después de secarse puede dar un aspecto opaco a la lona, especialmente si no se aclara adecuadamente.

El vinagre blanco, por otro lado, es lo suficientemente suave para no dañar la lona, pero lo suficientemente fuerte como para eliminar las manchas. Su fórmula líquida asegura que penetra en las fibras de la zapatilla, limpiando a fondo sin dejar residuos.

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