Este es el truco para agrandar tus zapatillas si te vienen justas

Para que unas zapatillas resulten cómodas al caminar deben de ajustarse de manera correcta al pie. Si esto no ocurre es posible que tu pie empiece a sufrir dolores y tengas que recurrir a profesionales para poder poner solución a los problemas ocasionados.

Además, es muy importante saber elegir el calzado adecuado para cada ocasión. Si vas a realizar ejercicio físico no necesitas el mismo calzado que para acudir a tu puesto de trabajo, pero dependiendo del deporte que realices necesitarás un tipo de calzado u otro.

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5 recomendaciones de los podólogos

1. Hidratar bien los pies. Especialmente en verano porque los pies están más expuestos y se deshidratan más de la cuenta. Si tomas la decisión de pasarte al calzado cerrado durante los meses de calor es posible que aparezcan ampollas por el roce y el contraste.
2. Escoger el mejor calzado. Según cuál sea la pisada y la morfología de tu pie te corresponderá un tipo de calzado u otro. Siempre es recomendable acudir a un experto para que te ofrezca indicaciones.
3. Revisar bien las plantillas. Si los zapatos han estado guardados y sin utilizar durante varios meses puede que las plantillas se hayan resecado por la sudoración, estén gastadas o rotas.
4. Revisar las suelas. Para corroborar que están en buen estado, ya que si no lo están pueden ser dañinas para los pies.
5. Escoger los calcetines adecuados. Para algo insignificante, pero no lo es. Escoger unos buenos calcetines es fundamental, puesto que deben ser de fibras naturales y que permitan una transpiración correcta al pie. Asimismo, deben aportar una protección térmica adecuada a cada época del año

Truco

Si las zapatillas deportivas te están justas, que no pequeñas un usuario de TikTok nos muestra cuál es el truco para agrandarlas y que podamos disfrutar de una total comodidad al llevarlas.

Para llevar a cabo el truco hay dos opciones. En primer lugar, mejor un par de calcetines, escurrirlos bien e introducirlos hasta el fondo de la zapatilla. La segunda opción, es coger una bolsa hermética, introducirla en la zapatilla, llenarla de agua y cuando lo tengas listo hacer un nudo para que no se caiga el agua introducida.

A continuación, debes meter las zapatillas deportivas en el congelador durante un par de días. Una vez hayan concluido las 48 horas las sacas y dejas que el agua de la bolsa se descongela para poder extraerla con mayor facilidad.

"Yo diría que la zapatilla con la bolsa de agua ha quedado algo mejor, pero la de los calcetines tampoco ha quedado mal" afirma el protagonista del vídeo.

Este truco es válido para las deportivas de piel, de malla o de tela. Además, en lugar de calcetines puedes utilizar papel de periódico o un trapo para introducir en las zapatillas. Cuando lo hagas notarás una mayor comodidad y amplitud a la hora de lucir tu calzado.