Aurah Ruiz y Jesé Rodríguez han cumplido su sueño: convertirse en marido y mujer.

La 'influencer' y el futbolista canario contrajeron matrimonio en una espectacular ceremonia celebrada en uno de los entornos más idílicos y novedosos de Gran Canaria, el Perchel Beach Club.

La pareja, que ha querido mantener en secreto todos los detalles de su boda hasta que pasase tan señalada fecha, ha protagonizado un emocionante último capítulo del reality de la joven, La boda de Aurah y Jesé, en el que se desvelaban los entresijos de este especial día: el traje de la novia, los nervios previos al casamiento, los asistentes a la boda... Y así un largo etcétera de momentos que han quedado inmortalizados en MTMAD.

Además, la 'influencer' ha colgado un espectacular álbum fotográfico de la ceremonia en la que le dedica unas preciosas y sentidas palabras a su recién estrenado marido. "Este es el día más mágico que he vivido en mi vida, el día en que me convertiste en tu mujer. Te amo Jesé, nunca olvidaremos lo que vivimos este día una boda inolvidable. A partir de este día dejamos el pasado atrás para escribir una nueva historia donde solo habrá paz felicidad y amor. Un nuevo camino. Una nueva vida fuera nos espera y cómo te dije en el altar todos los días de mi vida. Te amo", reza el texto que acompaña a la fotografía.

Sin embargo, en los 22 minutos de duración del episodio, hay un emocionantísimo momento que no ha pasado desapercibido para los fans de la pareja y que tiene como protagonista principal al hijo del ya matrimonio, el pequeño Nyan.

El invitado más especial

El momento en el que la pareja iba a colocarse las espectaculares sortijas de brillantes que han elegido para sellar su amor, el encargado de llevarle los anillos al altar fue el hijo de la pareja, el pequeño Nyan, quien se convirtió en el otro gran protagonista de la boda.

El hijo del futbolista y la también concursante de realities le entregó los anillos a los recién casados mientras los tres se fundían en un emotivo abrazo. "Mamá está como una princesa" decía risueño el niño a las cámaras que grabaron toda la celebración.