Bótox casero: el mismo efecto pero más barato y sin tener que pincharte
Es un fenómeno que proviene de Asia, donde las mascarillas de ingredientes naturales se utilizan para lograr un efecto lifting muy similar al de las inyecciones de toxina botulínica
Los secretos de belleza de Asia han llegado hasta nuestros hogares con una tendencia que promete un efecto lifting sin pasar por el quirófano. ¿Te gustaría tener una piel de porcelana de forma natural y económica? Te presentamos el bótox casero, una receta sencilla que promete borrar arrugas y aclarar el cutis utilizando ingredientes que probablemente ya tienes en tu cocina.
El efecto lifting es uno de los tratamientos estéticos más populares para quienes buscan rejuvenecer su apariencia. Pero, ¿sabías que con una mezcla de semillas de linaza, agua, espinaca y col verde, aceite de oliva y leche puedes obtener resultados similares?
El bótox casero es un fenómeno que proviene de Asia, donde las mascarillas de ingredientes naturales se utilizan para lograr un efecto lifting similar al de las inyecciones de toxina botulínica. Los ingredientes ricos en vitamina E, luteína y ácido láctico prometen nutrir la piel y mantener su elasticidad con solo una aplicación semanal.
Ingredientes y cómo preparar el bótox casero
Entonces, ¿cómo preparar este bótox casero? Aquí te contamos todo lo que necesitas:
- Una cucharada sopera de semillas de linaza: ricas en vitaminas B1, B2 y B6, además de cobre y fósforo, estas semillas son ideales para tratar problemas de arrugas, manchas o cicatrices, ya que suavizan y aclaran la piel.
- 200 gramos de espinaca y 200 gramos de col verde: estas verduras aportan todas las vitaminas, nutrientes y antioxidantes que la piel necesita para mantenerse elástica, joven, suave y radiante. Su contenido en vitamina C y A desintoxica la piel y mejora la apariencia de los poros y líneas de expresión.
- 1/4 de taza de aceite de oliva: este aceite hidrata incluso los tejidos más profundos de la piel, combatiendo la sequedad y la acumulación de células muertas. Además, su vitamina E previene el envejecimiento celular y la pérdida de elasticidad y firmeza.
- 1/4 de taza de leche: las proteínas de la leche favorecen la generación de colágeno, fundamental para disminuir la aparición de arrugas y líneas de expresión y lucir una piel más joven y tersa.
Estos son los pasos a seguir una vez que tengas ya todos los ingredientes: hierves las verduras durante 5 minutos y luego las mezclas en un recipiente junto al aceite de oliva, la leche y las semillas de linaza hasta obtener una mezcla homogénea.
Después, con el rostro limpio, te aplicas la mezcla con un pincel o con las manos, dejando actuar durante 15 minutos. Por último, enjuágate con agua fría. Para mejores resultados, repite al menos una vez por semana. ¡Adiós, arrugas; hola, piel de porcelana!
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