Una limpieza bucal adecuada implica que los dientes están limpios, las encías tienen un color rosado y no sangran al cepillar y no hay mal aliento constante. Si existe alguno de estos problemas de forma persistente, es importante acudir al odontólogo ya que estas infecciones indican que existe un problema.

¿Cómo realizar una limpieza adecuada?

La buena salud bucal repercute en su bienestar general. Por ello hay que tener cuidados diarios como el cepillado y el uso de hilo dental. Hay que visitar al dentista al menos una vez al año o a la que notemos la más mínima molestia para evitar que el problema progrese.

-Cepillarse en profundidad y usar hilo dental por lo menos dos o tres veces al día.

-Consumir una dieta equilibrada.

-Usar productos dentales con flúor o enjuagues fluorados si se lo ha indicado el odontólogo.