Las personas que realizan ejercicio diario y que poseen un índice de masa corporal normal presentan un 30% menos de incidencia de los cánceres más comunes como serían de colon, mama, próstata, pulmón y útero, tal y como afirman los especialistas de Quirónsalud Alicante y Torrevieja.
La razón de la influencia de la obesidad en la incidencia del cáncer se encuentra en un incremento de la insulina y del IGF-1, factores ambos del incremento de las células tumorales. “La obesidad”, añade el doctor Antonio Brugarolas, jefe del Servicio de Oncología de Quirónsalud Torrevieja, “también promueve una situación de inflamación crónica en el organismo y un exceso de ciertas hormonas producidas en el tejido graso como los estrógenos, que favorecen, por ejemplo, el desarrollo de cáncer de mama y endometrio. Además, se ha observado una relación del cáncer a edades más tempranas con la obesidad infantil y juvenil”.
El ejercicio por su parte actúa como antiinflamatorio del organismo y ayuda a reforzar el sistema inmunológico. Como explica el doctor Joseba Rebollo, especialista del Servicio de Oncología de Quirónsalud Alicante,” el cáncer tiene un componente de inflamación y, desde luego, necesita debilitar el sistema inmune para desarrollarse.
Así mismo el ejercicio acelera el sistema de transporte de glucosa a los músculos y, como consecuencia, los niveles de la insulina y del IGF-1 son más bajos en gente que es físicamente activa.
Además, el ejercicio ayuda a pacientes que ya han sido diagnosticados de cáncer aumentando su supervivencia incluso en los pacientes en los que persiste la enfermedad, mejora su calidad de vida y restaura el tono físico al nivel previo al diagnóstico”.
Para prevenir el cáncer los especialistas de Quirónsalud recomiendan la adopción de hábitos de vida saludables entre los que se incluyan una dieta equilibrada, el ejercicio diario y los chequeos periódicos de detección precoz del cáncer de mama, colorrectal y prostático como las mejores herramientas de prevención.
