Como cada año, la Unidad de Dermatología del Centro Médico Vistahermosa 77 pretende promover la educación para la salud e implementar hábitos saludables de exposición solar, favorecer el diagnóstico precoz del cáncer cutáneo, así como el valor de una exploración periódica de la piel.
El cáncer de piel es el más frecuente entre la población mundial. Los tipos más comunes de cáncer de piel son el carcinoma de células basales y el carcinoma de células escamosas. Ambos son cánceres de piel no melanoma. El cáncer de piel no melanoma casi nunca se disemina a otras partes del cuerpo.
¿Qué es el melanoma?
El melanoma es un tipo de cáncer de piel que representa el 1.5% de los tumores a nivel global y que presenta una mortalidad elevada si no se detecta a tiempo. Gracias a los avances actuales, la gran mayoría de estos cánceres (más del 95%) pueden curarse completamente si se realiza un diagnóstico precoz.
Cabe destacar que la aparición de un melanoma está determinada por factores genéticos y ambientales:
- Dentro de los factores genéticos, nos encontramos con características físicas que pueden ser factores de riesgo para el desarrollo de un melanoma como: tener la piel clara, con dificultad para broncearse y facilidad para presentar quemaduras solares; ojos azules o verdes y pelo rubio o pelirrojo; un número elevado de lunares o tener antecedentes familiares o personales de melanoma.
- Los factores ambientales se relacionan sobre todo con una exposición solar excesiva. Entre ellos encontramos: los antecedentes de quemaduras solares de segundo grado (ampollas) en la infancia, exposiciones solares intensas e intermitentes, actividades laborales o de ocio expuestas a altos niveles de luz solar intensa o la utilización de dispositivos de bronceado.
Cómo detectar un melanoma
Existen una serie de signos de alerta para sospechar que podamos estar ante un melanoma. Este conjunto de signos se conocen como la regla A-B-C-D-E.
A de Asimetría del lunar. Al comparar una mitad con otra del lunar, se ven diferentes.
B de Bordes irregulares. Los bordes se muestran irregulares, aparecen escalonados.
C de Coloración poco uniforme. Variedad de coloración, con partes marrones, negras o azules.
D de Diámetro. La mayoría de los lunares tienen un diámetro menor de 6 mm.
E de Evolución. Cualquier cambio en el lunar en las últimas semanas o meses.
En aquellos casos en los que el paciente, por su propia autoexploración, observe cualquier modificación en un lunar, es necesario que acuda a la consulta del dermatólogo.
Además del diagnóstico precoz, la Unidad de Dermatología del Centro Médico Vistahermosa 77 advierte que es importante seguir una serie de recomendaciones para lograr disminuir el riesgo de contraer un cáncer de piel. Es aconsejable evitar las quemaduras solares en niños pequeños. De la misma forma, se debe reducir la exposición solar innecesaria e inadecuada, sobre todo en las horas centrales del día en los meses de primavera y verano, y reducir la práctica de actividades al aire libre sin la debida protección solar.
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