Arranca la campaña de vacunación de la gripe y, como cada año, hay una pregunta que ronda la cabeza de muchos: ¿Puede la vacuna ocasionar gripe? Tanto es así que el Ministerio de Sanidad ha decidido responder a esta cuestión en su portal de preguntas frecuentes debido a la importancia de la vacunación, especialmente este año por la coincidencia temporal con la pandemia del covid-19.

Desde la cartera dirigida por Salvador Illa son tajantes: "Las vacunas inactivas actuales no contienen virus vivos. Están compuestas por fracciones de virus o subunidades proteicas y, por tanto, no pueden causar gripe". Asimismo, desde Sanidad explican que existe existe una vacuna atenuada -de virus vivos debilitados- que está autorizada en España y solamente se utiliza en "población infantil y joven sana", pero que no se comercializará durante la temporada 2020-2021.  En todo caso, las indicaciones para su utilización excluyen a las personas que con mayor probabilidad podrían desarrollar la enfermedad con un virus debilitado, como aquellas con enfermedades crónicas.

Reacciones locales

De igual forma indican que, al igual que con otras vacunas, tras la vacunación pueden producirse "reacciones locales o más infrecuentemente fiebre, malestar y dolores corporales" que se inician en las primeras 6-12 horas y suelen persistir entre uno y dos días. "Las reacciones más comunes que tienen las personas vacunadas frente a la gripe son considerablemente menos graves que los síntomas que causa la enfermedad real", matizan.

Síntomas catarrales

Entonces, ¿por qué hay personas que presentan síntomas catarrales tras la vacunación frente a la gripe? Desde Sanidad apuntan a tres razones:

  • Coexistencia de numerosos virus respiratorios como "rinovirus, virus sincitial respiratorio, virus parainfluenza o adenovirus" que causan enfermedad durante la temporada de gripe dado que la vacuna no protege frente a estos otros virus.
  • La protección inmunitaria que se recibe con la vacuna se desarrolla a las dos semanas, por lo que se puede infectarse inmediatamente antes de vacunarse o las dos semanas posteriores.
  • Las personas pueden infectarse por un virus de la gripe diferente a los que están incluidos en la vacuna o "pueden no quedar adecuadamente protegidas debido a la edad avanzada o al estado de salud".