El cáncer de próstata es el tumor sólido más común en los hombres, es por ello que un diagnóstico precoz y preciso es imprescindible para poder tratarlo adecuadamente. El diagnóstico del cáncer de próstata ha cambiado enormemente en estos últimos años. ¿Qué pasos deberíamos seguir para detectarlo?

1) Surge la sospecha del tumor de próstata

Cada vez es más frecuente que el hombre se realice controles rutinarios de salud y, aunque es sus primeras fases el tumor de próstata es asintomático, es decir, que no notamos nada, la sospecha de padecer un tumor de próstata puede aparecer:

- Por la historia clínica, es decir por los síntomas que padecemos: molestias, urgencia o frecuencia al realizar la micción.

- Por el resultado de análisis tan estandarizados como el PSA (antógeno prostático específico).

- O bien por los hallazgos encontrados de forma casual en una ecografía o tacto rectal.

2) Resonancia magnética

Ante la sospecha de poder encontrar un tumor de próstata, deberíamos realizar una resonancia magnética, si es posible multiparamétrica. Esta es hoy en día la mejor técnica de imagen, no invasiva para la detección de zonas sospechosas dentro de la próstata que deberían ser analizadas. Esta técnica permite combinar información morfológica con imágenes funcionales. Es muy superior a la ecografía convencional.

El cáncer de próstata es el tumor sólido más común en los hombres.

3) Reunión del urólogo y radiólogo

Una vez tenemos la información que nos proporciona la resonancia, es imprescindible una reunión del urólogo y radiólogo para interpretar toda la información obtenida.

Este paso intermedio es muy importante puesto que nos orientará a:

-Parar el estudio de detección del posible tumor, si los datos que hemos obtenido nos dicen que la probabilidad de encontrarlo es muy baja. Tomaremos entonces una actitud expectante y seguiremos controlando.

-Continuar con el estudio porque hay evidencia suficiente para ello.

4) Biopsia fusión

Es el mejor método que tenemos para detectar el cáncer de próstata y debería ser el utilizado para mejorar la fiabilidad en el diagnóstico de este tumor. De cada 10 hombres con sospecha clínica o analítica de padecer cáncer de próstata, 5 tienen tumor; sin embargo, con la biopsia transrectal clásica sólo son diagnosticados dos.

Esta circunstancia hace que muchos pacientes con el valor de PSA elevado puedan ser sometidos a varias biopsias de próstata a lo largo de su vida y, sin embargo, aunque el PSA siga subiendo, no se encuentra tumor en las biopsias tradicionales.

¿En qué consiste la biopsia por fusión?

La técnica consiste en superponer las imágenes que obtenemos de la resonancia con las que tenemos de la ecografía y de esta manera poder dirigir la biopsia hacia los puntos considerados con mayor probabilidad de tener tumor.

Una vez tenemos la información que proporciona la resonancia, es imprescindible una reunión del urólogo y radiólogo.

 ¿Qué ventajas aporta?

• El tiempo de realización es de unos 20 minutos.

•Se realiza con sedación, es por tanto totalmente indoloro, no se va a notar ni sentir nada.

•Es un procedimiento mucho más preciso. La biopsia fusión respecto la convencional representa un gran avance. Detecta un 30% más de tumores peligrosos. Evita muchas de las biopsias que necesitamos repetir con la técnica convencional.

•Más seguro. La técnica perineal evita el recto y por tanto, la contaminación bacteriana que este aporta. Es decir, disminuimos enormemente la posibilidad de infección.

5) Laboratorio de anatomía patológica

Las muestras extraídas en la biopsia son remitidas al especialista para analizarlas.

El patólogo nos dirá si hay o no tumor y si éste existe cuál es su grado de malignidad, infiltración.

6) Decisión final

Con todos estos estos datos y la ayuda del urólogo tendremos la información suficiente para decidir cómo debemos tratar el cáncer de próstata.  

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