La buena salud de nuestros pies afecta directamente a nuestro bienestar general. Así lo ha afirmado el Ilustre Colegio Oficial de Podólogos de la Comunidad Valenciana (ICOPCV) que ha recordado que cuando padecemos problemas en los miembros inferiores es habitual que se dificulte la capacidad de caminar, de tener una movilidad adecuada, lo que lleva al sedentarismo y a la sensación de la persona de perder autonomía para desplazarse por sí misma con normalidad y, eso, en numerosos casos afecta al estado de ánimo.

Callosidades, uñas encarnadas, fascitis plantar, así como juanetes, son algunas de las patologías que mayores molestias provocan y dificultan la movilidad.

“Una persona que no ha cuidado sus pies correctamente y que sufre dolores con frecuencia, irá reduciendo poco a poco su actividad física y, en algunos casos, por completo, de ahí la importancia de atender lo antes posible cualquier patología con la finalidad de solucionarla y permitir a la persona recuperar su capacidad natural de movimiento”, ha declarado Pilar Nieto, presidenta del ICOCPV.

Los podólogos de la Comunidad Valenciana recomiendan realizar al menos una vez al año una revisión por parte de un profesional de la Podología para realizar una exploración de los pies y realizar un estudio biomecánico de la pisada para analizar si existe algún tipo de alteración que podría derivar en problemas mayores y poder aplicar con la máxima antelación posible un tratamiento adecuado que evite las limitaciones de la marcha en el paciente.

Algunas recomendaciones generales para cuidar adecuadamente la salud de los pies son utilizar un calzado óptimo, adecuado y cómodo que no oprima en exceso y que dé confort en cada paso, hidratar diariamente nuestros pies para mantener el buen estado de la piel, y ante cualquier dolor mecánico en pies o tobillos es necesario acudir al podólogo.