“Operarse de la vista supone un antes y un después para nuestros pacientes ya que dejar de convivir con las gafas y lentillas es muy agradecido”, asegura el doctor Pedro Tañá, Director Médico Nacional del Grupo Oftalvist.
A principios del año 2000, nuestro país experimentó un crecimiento exponencial de la cirugía refractiva y, como consecuencia, se empezó a cubrir en diferentes centros oftalmológicos la alta demanda de procedimientos quirúrgicos para corregir defectos refractivos como la miopía, la hipermetropía y el astigmatismo.
En este contexto, Oftalvist se convirtió en el primer grupo oftalmológico europeo en incorporar una tecnología láser de femtosegundo en 2004 para aportar en esta intervención una mayor precisión y rápida recuperación, así como una cirugía 100% láser. Para la compañía “los avances están para aplicarlos, ya que aseguran una mejora en la calidad visual y seguridad para nuestros pacientes”, según el doctor Tañá.
¿En qué casos se utilizan las lentes intraoculares?
Ahora bien, en un sector donde las técnicas evolucionan de forma constante, además del láser, las lentes intraoculares hoy en día también son una excelente alternativa para problemas de miopía, hipermetropía y astigmatismo.
“Es menos conocida pero, al igual que el láser, el implante de lentes intraoculares fáquicas proporcionan una muy buena agudeza visual. La elección de una técnica u otra dependerá de la valoración previa que realice el oftalmólogo especialista en consulta”, explica el doctor.
Además, aquellos pacientes que no son aptos para una cirugía refractiva láser, ya sea por su espesor corneal, graduaciones muy elevadas u otro tipo de limitaciones, como aquellos con queratocono, pueden ver esta opción como una posible solución en su deseo de dejar de depender de las gafas y lentillas.
“Con estas lentes podemos corregir hasta 18 dioptrías de miopía y 10 de hipermetropía. Sin embargo, hoy en día pacientes con menor graduación también pueden someterse a este tratamiento”, añade.
¿En qué parte del ojo se implantan las lentes intraoculares?
Los especialistas indican que tras un completo estudio de todos los parámetros necesarios, para confirmar la seguridad del procedimiento, el cirujano coloca, a través de la córnea, la lente intraocular detrás de la pupila, entre el iris y el cristalino.
Y esto, es una gran ventaja. “Al no extraerse el cristalino, esta cirugía es totalmente reversible. Es decir, el tipo de lente intraocular implantada se puede retirar en cualquier momento si fuera necesario, por ejemplo, si cambia la graduación. De lo contrario, el tiempo de vida de estas lentes es ilimitado”.
Otra cuestión son los problemas de sequedad ocular, ya que si el paciente tiene tendencia a padecer ojo seco, previo a una cirugía láser, ésta podría acentuarlo de forma puntual durante el postoperatorio. En este sentido, “la operación con lente intraocular no altera ninguna estructura corneal y se mantiene la correcta lubricación del ojo”, asegura el doctor Taña.
Resultados y calidad visual
Desde la Unidad de Cirugía Refractiva de Oftalvist, coinciden en que “a los pocos días tras la operación con una lente intraocular se consigue una gran nitidez”.
El paciente vuelve a casa el mismo día de la intervención ya que no requiere ingreso hospitalario y el tratamiento postoperatorio es sencillo a base de colirios durante los siguientes días.
Así pues, “una vez comprobado en las revisiones que la lente cumple todos los criterios de seguridad y no produce ningún tipo de molestia, conseguimos cumplir en un gran porcentaje de nuestros pacientes su expectativa de visión totalmente definida tanto durante el día como por la noche”.
Entre otras de sus ventajas, explica el doctor Tañá, que las lentes intraoculares también cuentan con un filtro ultravioleta como protección contra los rayos UV.
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