La artroscopia de la zona posterior del tobillo, es una técnica mínimamente invasiva, la cual presenta ventajas respecto a los abordajes convencionales mediante cirugía abierta, que implican una amplia disección debido a la profundidad a que se encuentra el tobillo respecto a la piel posterior. Las dudas sobre los problemas de cicatrización de las heridas en esta zona, sometida a altas fuerzas de tensión, se disminuyen con el uso de pequeños portales artroscópicos, que ordinariamente hacen innecesaria la inmovilización postoperatoria y aceleran la recuperación. 

Con un buen conocimiento aplicado de la anatomía de la región posterior del tobillo y utilizando una técnica correcta, este tratamiento quirúrgico ha demostrado ser seguro y efectivo.

El “Síndrome de pinzamiento posterior del tobillo”, se ha empleado durante mucho tiempo para describir el dolor de la parte posterior del tobillo que se agrava con la flexión plantar del mismo, de forma general.

Hoy en día, se ha evolucionado a un planteamiento más anatómico para diagnosticar la causa del dolor posterior, constituyendo un trastorno independiente el pinzamiento de las partes blandas de la parte posterior del tobillo, aunque frecuentemente asociado a él, el pinzamiento óseo posterior por un “Os Trigonum”. 

El “Síndrome de Pinzamiento de partes blandas de la parte posterior del tobillo”, se produce como consecuencia de un arrancamiento del fascículo profundo del Ligamento Tibioperoneo posterior (LTPP) del borde posterior del pilón tibial o una rotura de la parte posterior del Ligamento Deltoideo profundo (LDP).

Este síndrome aparece en actividades que implican una flexión plantar extrema, como ocurre en actividades deportivas como el Ballet clásico, en los/las gimnastas y en los deportes de patada como el futbol, kárate, etc., aunque también se observa en mujeres que caminan con tacones altos, o cuando se corre cuesta abajo.

Puede asociarse también con “Tenosinovitis del tendón del flexor largo del dedo gordo del pie”.

El dolor en la parte posterior del Tobillo que empeora con la flexión plantar, es más difuso cuando se asocia a esta afección del tendón flexor del dedo gordo, por inflamación ó estenosis.

A la exploración hay dolor a la palpación por delante del tendón de Aquiles y en la bolsa serosa retrocalcánea, siendo muy sugestivo de esta patología.

Hay que realizar un buen diagnóstico diferencial con las pruebas complementarias necesarias (Rx, RMN, TAC).

Tras un buen tratamiento conservador (reposo, fisioterapia, aines, modificación del calzado ó infiltraciones), si fracasa estaría indicado el tratamiento quirúrgico. Hoy en día se realiza por Cirugía Artroscópica con unos resultados según diferentes estudios desde un 80 a un 100 % de Excelentes ó Buenos con muy escasas complicaciones.

La patología deportiva, que está determinada por unas exigencias especiales de esfuerzo y habilidades son todavía más exigentes en su tratamiento, pues deben conseguir un estado funcional capaz no sólo de realizar esfuerzos y habilidades comunes, si no de dar rendimientos superiores a los realizables por sus competidores. Esta exigencia de perfección morfológica y funcional ha determinado la búsqueda de terapéuticas especiales y ha contribuido al desarrollo de esmeradas técnicas, como es el caso que nos ocupa de la Cirugía Artroscópica posterior del tobillo.

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