La mayoría de los escolares españoles comienza a utilizar calculadoras científicas a partir de 5º de Primaria.
Este accesorio matemático les acompañará durante muchísimos años por lo que es recomendable elegir un modelo que asegure una larga vida útil.
A todo el mundo le viene a la mente la marca japonesa Casio cuando piensa en una calculadora financiera.
Esta marca fue la creadora de la primera calculadora electrónica del mundo con función de memoria.
Desde su lanzamiento en 1965 hasta la actualidad los modelos han ido evolucionando e incorporando funciones en sus teclados.
Por eso, los expertos afirman con rotundidad que se trata de la empresa mejor especializada en este producto tras vender más de 1.000 millones de unidades desde su creación, convirtiéndose así en una referencia.
Pero existen otras marcas que ofrecen buenas alternativas a Casio.
Por eso en esta reseña aparecen otras 3 calculadoras científicas para que el usuario decida cuál se adapta a sus necesidades. Los precios oscilan entre los 7 y los 65 euros.
La mejor calculadora científica: Casio FX-991SPX II
Los padres que estén pensando en adquirir para la vuelta al cole de sus hijos la mejor calculadora del momento, encontrarán en la FX-991SPX II de Casio un modelo completo y al mejor precio que acompañará toda la vida estudiantil de sus retoños.
Esta calculadora científica no es programable, pero ofrece 576 funciones, (hojas de cálculo, logaritmos, potencias, raíces, trigonometría, estadística…), 47 constantes científicas, 40 pares de valores para conversiones métricas y cálculo de números complejos.
Tiene una pantalla LCD multilínea (de 4 a 6 líneas) de alta resolución y un teclado que separa por colores las diferentes funciones de la máquina.
Para que el futuro comprador vea lo avanzada que es, esta calculadora posibilita la creación de códigos BIDI para escanear a través del smartphone o de la tableta y generar una representación gráfica de la operación realizada.
Está fabricada con un diseño sencillo y sus menús pueden configurarse en español, catalán, euskera y portugués.
Una buena alternativa: Canon F-715SG
Para esos escolares que se inician en el uso de la calculadora científica, Canon oferta la F-715SG que, aunque no es tan compleja como el modelo anterior, es capaz de realizar hasta 250 funciones.
Permite el cálculo de problemas y funciones trigonométricas, estadísticas, combinatoria y permutaciones, fracciones, cálculos factoriales y un largo etcétera.
Su pantalla de LCD muestra una total de hasta 16 dígitos legibles claramente en dos líneas. En cuanto a su batería, se carga a través de energía solar o mediante pilas.
A los expertos les encanta que las calculadoras científicas de Canon están fabricadas con materiales reciclados que ofrecen 3 presentaciones de color: negra; blanca y rosa; y blanca y turquesa.
Es ligera y cómoda para llevarla en la carpeta o la mochila. Pero sobre todo destaca por tener una excelente relación calidad-precio. Es, sin duda, una de las mejores calculadoras financieras del 2018.
La más profesional: HP 35SC B12
La calculadora científico-técnica HP 35SC B12 presenta un diseño vintage elegante que rememora al exitoso modelo HP 41 de los años 70.
Los nostálgicos sentirán atracción inmediata hacia ella como si de una reliquia se tratara, pero su aspecto no es lo más importante.
Los proyectos científicos necesitan precisión, fiabilidad y funcionalidad para triunfar.
Por eso, HP ha creado una máquina altamente profesional pensada para estudiantes de ingeniería, ciencias o matemáticos en esencia.
Con ella se pueden realizar más de 100 de funciones integradas que se almacenan en su memoria de 30 kilobytes y su aplicación HP Solve le hace funcionar de forma rápida.
Su pantalla LCD es de alta calidad, es de gran tamaño, tiene capacidad para 14 caracteres que se dividen en dos líneas y posibilita el ajuste del contraste para obtener una visibilidad óptima en todo momento.
Su fuente de alimentación son las pilas recargables y, además, dispone de un sistema de ahorro de energía que la apaga a los 10 minutos de finalizar su uso.
Incorpora una funda protectora premium que la protege ante los golpes y ralladuras.
Este modelo puede utilizarse por cualquier estudiante, pero su elevado precio se ajusta para quienes necesiten un rendimiento profesional.
El mejor precio: Helect H-1002
¿Alguien necesita una calculadora financiera profesional y a un precio increíble?
El estudio realizado entre decenas de modelos ha encontrado uno perfecto para estudiantes de Secundaria olvidadizos y propensos a perder cosas, o para los que simplemente se apañan con algo económico.
La H-1002 de Helect es una calculadora robusta y de grado profesional.
Con ella se manejan fácilmente cálculos estadísticos variables, modos de ángulos y funciones de notación científica.
Le darán uso tanto los estudiantes de Primaria como los de Secundaria, universitarios o profesionales.
Helect ha diseñado una carcasa protectora extraíble que la protege ante las caídas y los golpes de los pequeños científicos.
Incorpora una pantalla LCD con visualización de dos líneas que muestra la operación y el resultado al mismo tiempo.
Esta función es muy práctica para localizar posibles errores de cálculo.
Incluye una batería interna que ofrece una vida útil de 24 meses.
A tener en cuenta
Antes de pasar al estudio individualizado de cada una de ellas, se explica a continuación qué características debe tener una buena calculadora financiera y en qué se debe pensar antes de hacer clic en “comprar”.
- Funciones y capacidad de cálculo. Hay modelos básicos ‒ideales para estudiantes‒ que realizan cálculos primarios y otros más complejos y profesionales con funciones de hasta 25.000 elementos de programación.
- Pantalla. Es preferible adquirir un aparato donde se visualicen bien las fórmulas y operaciones que se van introduciendo. Las hay con una pantalla de una sola línea y otras de mayor tamaño y a color que tienen hasta funciones gráficas.
- Teclado. El mercado ofrece modelos con teclas pequeñas, grandes o táctiles. El consejo es decantarse por aquella con la que se trabaje más cómodamente.
- Fuente de alimentación. La mayoría funcionan con pilas, pero las hay con batería de litio.
- Diseño. Aunque es una cualidad menor, algunos compradores sí que optan por aparatos de llamativos colores o calculadoras de bolsillo.
