Google Maps es una de las apps más útiles que puedes llevar en tu smartphone, puesto que tienes la cartografía mundial en el bolsillo, lo cual viene muy bien cuando vas en coche.

Ya ha sustituido a los GPS que salieron al mercado hace unos años, y de hecho no es raro ver a los vehículos con el teléfono pegado al cristal indicando una ruta al conductor.

Tiene dos desventajas frente a aquellos primeros GPS. Consume datos de tu tarifa móvil, y, por lo tanto, también necesita cobertura, aunque ambas se pueden solucionar con el truco que vas a ver a continuación.

Los mapas se pueden descargar en nuestro teléfono

El truco es muy sencillo y no hay que hacer nada extraño, puesto que es el propio Google el que te lo ofrece.

Consiste en la posibilidad de descargarte los mapas, para lo cual solo hay que entrar a Google Maps y hacer clic en el icono que tiene tu foto, avatar o inicial de tu nombre. Te saldrán unas opciones y tienes que elegir “mapas sin conexión”.

Esto te lleva a otra pantalla y aquí activas la opción “selecciona tu propio mapa”, lo que te permitirá elegir qué quieres volcar en la memoria interna del smartphone.

Ocupan espacio y algunas funciones no están disponibles

Con estos mapas guardados ya vas a poder navegar sin usar los datos e incluso sin cobertura, pero a cambio necesitas espacio en el móvil, aunque lo cierto es que no ocupan demasiado, pues el mapa entero de una ciudad como Madrid solo pesa unos 100 megas.

En este caso, no tendrás disponibles las rutas en transporte público, a pie o en bici, y cuando vas en coche, tampoco los avisos de atascos o los caminos alternativos que necesitan la conexión a la red con el fin de funcionar.

De todas formas, es algo asumible, pues lo normal cuando descargas estos mapas es que los quieras para hacer rutas en coche por carretera.