En 1974 la partida de dominó de la sobremesa, el vistazo al periódico de cada mañana y la tertulia con los compañeros en el sofá se hicieron con el abrigo puesto. Al menos en el asilo de Benalúa, donde los ancianos pasaron mucho frío en aquellas navidades.
Mientras el Simca 1200 salía elegido como el coche del año