Mientras que la mayoría de los trabajadores sueña con llegar a la jubilación, los autónomos cuentan con una opción intermedia: la jubilación activa. Esta modalidad, regulada por la Ley General de la Seguridad Social bajo el término “Pensión de jubilación y envejecimiento activo”, permite a los autónomos seguir trabajando y cobrar su pensión al mismo tiempo. A través de esta fórmula, se ofrece la posibilidad de compatibilizar el empleo, ya sea propio o ajeno, con los beneficios económicos de la jubilación, brindando flexibilidad para continuar en el mercado laboral mientras se disfruta del retiro. Más información.
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