Decir que la tormenta de ayer en Elche fue intensa es quedarse corto. Las lluvias cayeron con mucha potencia en un corto espacio de tiempo desviando vuelos en el aeropuerto de Alicante-Elcheretrasando el partido de fútbol del Elche, dificultando el tráfico y causando cortes de luz, como el apagón que sufrió el Estadio Martínez Valero.

Además, la Policía Local se vio obligada a cortar la circunvalación sur de la ciudad ilicitana por una enorme laguna que se había formado sobre ella y convirtiendo la circulación en deporte de riesgo.

En el Estadio Martínez Valero, completamente a oscuras como consecuencia de la tromba de agua, los aficionados que esperaban el inicio del partido entre el Elche y el Mallorca jaleaban cada relámpago y cada trueno. Una inusual situación que acabó convirtiéndose en fiesta, con los hinchas coreando e iluminando las gradas con sus teléfonos móviles mientras se decidía si el encuentro debía ser aplazado o cancelado.

Finalmente, el encuentro comenzó con media hora de retraso y acabó con un empate en el que el Elche CF se vio muy perjudicado por la actuación arbitral.

El tormentón que cayó ayer en Elche obligó también a desviar varios vuelos que tenían previsto aterrizar en el aeropuerto de Alicante-Elche, una maniobra que resultaba prácticamente imposible en el momento en que la tromba arreciaba buena parte de la provincia. Aviones procedentes de Bournemouth, Escocia, Manchester y Maastricht que han acabado en lugares tan dispares como Ibiza, Málaga, Murcia o València.

Y mientras la tromba de agua provocaba el caos en algunos puntos de la ciudad los rayos iluminaban el cielo de la ciudad ilicitana, como se pudo ver en las redes sociales, que se inundaron también de vídeos y fotografías de ciudadanos que se convirtieron en improvisados fotógrafos y meteorólogos.

Y es que las tormentas acompañadas de gran cantidad de aparato eléctrico que se produjeron en la tarde-noche de ayer lunes fueron generalizadas en toda la provincia de Alicante, con acumulados irregulares pero de cantidades considerables en la gran mayoría de los casos. Una inestabilidad meteorológica que se prevé que continúe a lo largo de esta semana.